Editorial Vicens Vives ha llegado a un acuerdo con los representantes de los trabajadores para aplicar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) después de reducir el número de afectados, de los 82 anunciados inicialmente en 62, que suponen un 21% de la actual plantilla.

Los trabajadores han ratificado esta propuesta en una asamblea este martes. En un comunicado, la dirección de Vicens Vives celebra la consecución del acuerdo con los trabajadores. Añaden que esta medida laboral les permitirá adaptarse "al nuevo contexto económico del sector y salvaguardar el proyecto empresarial".

De los 11 centros que el grupo editorial tiene en España, esta regulación se aplicará en nueve, de los cuales el más afectado será el de Barcelona. Los únicos centros donde no se aplicará son los de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona), dedicado a la logística del grupo editorial, y el de Granada. Los trabajadores afectados recibirán una indemnización de 20 días de sueldo por año trabajado con el añadido de un 25% de este importe: un 10% a pagar en el momento de la firma y otro 15% en noviembre de 2024.

Este grupo editorial lleva años acumulando pérdidas en el negocio de los libros de texto escolares. En 2022 facturó 29,1 millones de euros, un 7,2% más que los 27 millones de un año antes, si bien repitió las pérdidas, que en cada uno de estos dos ejercicios se situaron en torno a los 2,2 millones de euros. Las pérdidas se elevaron en el año pandémico de 2020 a cerca de 11 millones de euros. En total, un agujero 15 millones de euros en solo tres años.

A causa de estos contratiempos, el año pasado suscribieron un crédito de 16,2 millones de euros con Cofides, la sociedad publicoprivada que gestiona fondos estatales para salvar empresas que se vieron gravemente afectadas por el Covid-19. De este importe, más de 13 millones de euros corresponden a un crédito participativo. Además, se han visto obligados a reducir el capital social en 5,6 millones de euros, hasta quedar en tan solo 60.000 euros, según publicó el BORME este diciembre.

Retrasos del gobierno central

En el informe de gestión consolidado de 2022, Editorial Vicens Vives atribuye sus dificultades económicas al retraso del gobierno central en publicar en el BOE la LOMLOE, la nueva ley orgánica que establece los contenidos educativos, hecho que provocó que se aplazaran las aprobaciones en las comunidades autónomas. Algunas ni siquiera impulsaron la aplicación de esta reforma. Estos retrasos legislativos provocaron que los libros escolares salieran al mercado mucho más tarde. Como otras editoriales, se vieron obligados a aplazar la impresión de libros, hecho que supuso "inversiones millonarias" que coincidieron "con un escenario de incremento de costes y de inflación".

Al frente del grupo editorial está Jaume Vives Barceló, nieto del célebre escritor e historiador Jaume Vicens Vives y de su esposa, Roser Rahola de Espona, que murió en el 2020 a la edad de 105 años.