A medida que los afectados por los impagos de la mítica productora publicitaria de Barcelona Albiñana Films, fundada en el año 1982, van entrando en contacto entre sí, la cantidad de la deuda conocida va ascendiendo. Si hace una semana, cuando ON ECONOMIA destapó el despido de sus trabajadores y el agujero con proveedores y freelance, la deuda era de 30.000 euros en nóminas y 40.000 en facturas, esa cantidad se ha triplicado en menos de una semana y asciende a unos 100.000 euros por nóminas y otros 100.000 en facturas. "Y creemos que seguirá creciendo", apunta una de las afectadas, teniendo en cuenta que en el recuento ni siquiera están todos los afectados conocidos, que ascienden a más de 163.
Pese a tener cuantiosas deudas acumuladas de mediados del año pasado e incluso del año 2022, y una deuda con la Seguridad Social que asciende a 200.000 euros y haber justificado que no tienen dinero para pagar a quienes han podido localizar a los socios, la empresa todavía no ha entrado en concurso de acreedores. Los autónomos y empresas afectadas estudian llevarlos a concurso de acreedores culpable, que es aquel en el que el estado de insolvencia es causado por dolo o culpa grave del deudor.
Mientras tanto, los hermanos Albiñana, Ricard y Ramsés, "están desaparecidos", apuntan fuentes de Jacaranda Publicidad, otra agencia afectada que prepara una demanda por impagos por su parte, independiente del grupo de afectados. ON ECONOMIA también ha intentado sin éxito contactar con ellos. Esta productora, que realizó para Albiñana trabajos de postproducción, es una de las más afectadas por Albiñana: les deben casi 27.000 euros. "Siempre han pagado mal, siempre con retrasos, pero les vamos permitiendo, hasta que empiezan a incumplir sus propios plazos. Al principio respondían al correo electrónico, ya ni eso", comentan desde la empresa. "Es una pena, porque eran una empresa amiga", lamentan.
"Es una barbaridad, no realizas un trabajo de 27.000 euros para no cobrarlo. No es todo beneficio, hay unos gastos detrás que hemos tenido que cubrir. Hemos tenido hasta que pagar el IVA de una factura que nunca cobraremos", abundan. "No entiendo lo fulminante de este final. Es una empresa que siempre ha ido trabajando, aunque pagaran mal. Nos deben también una factura de 2022", completan.
Los 10 trabajadores en plantilla de la empresa, con sede en la Bonanova, que sí que habían cobrado las nóminas hasta el mes de diciembre, recibieron una carta de despido el lunes 29 de diciembre. Ante ellos sí que dieron la cara y les explicaron que "no había dinero" y que, por tanto, tampoco recibirían la última nómina, la de enero, ni los finiquitos. Algunos trabajadores estudian también poner una demanda aparte, puesto que los afectados por impagos de nóminas que están en el grupo de afectados no eran trabajadores en plantilla, sino personas que fueron contratadas por proyectos y que nunca cobraron.
Con más 42 años de historia, Albiñana Films nació en los años 80 de la inquietud creativa de Ricardo Albiñana (padre de los actuales socios y fallecido en 2021), que hasta entonces se dedicaba tan solo al cine y que vio en la publicidad un mayor nicho de negocio, así como un campo de innovación creativa y tecnológica, tal y como explicó en una entrevista con TVE en el año 2015.
Llegó a facturar 15 millones
Entre las empresas para las que grabaron anuncios en 2023 por los que no han pagado a sus trabajadores están algunas grandes como Aldi, Audi, Nurofen o RBA. En el mismo año, tal y como publicitaba en sus redes Albiñana Films, grabaron anuncios para Idealista, Simyo o General Ópticas.
Las últimas cuentas disponibles en el Registro Mercantil son las del año 2021 y arrojan una facturación de 4,9 millones de euros con 31.851 euros de beneficios, que compensaban parte de los 262.579 euros de pérdidas de 2020, año de la pandemia, en el que la empresa facturó 2,58 millones de euros. En los años anteriores, la empresa había conseguido también cerrar con beneficios de 67.269 euros en 2019 (facturando 4,7 millones) y de 256.465 euros en 2018, por lo cual no hay un agujero de pérdidas acumuladas que preceda a su caída.
En el año 2014, la empresa grabó uno de sus anuncios más importantes, dirigido por el director de cine Oliver Stone, para la Copa del Mundo de Brasil. Por aquel entonces, la empresa facturaba 5,5 millones, según el Registro Mercantil.
El mejor año de facturación de la empresa fue 2008, al menos entre los disponibles en el Registro Mercantil, que parten de ese año. Albiñana Films facturó entonces 15 millones de euros, aunque registró pérdidas de 125.000 euros. Desde entonces, coincidiendo con la crisis financiera, la facturación fue cayendo, pero se estabilizó entre los 4 y 5 millones de euros en los últimos años.
En enero del pasado año, Ricard Jr. dejó de ser el administrador de la empresa, que pasó a manos de Ricardo Cofiño. Ricard Albiñana es también administrador de Bacteria Films SL, productora fundada en el año 2002 con sede en la Avenida Roma de Barcelona y cuyos últimos resultados disponibles en el Registro Mercantil datan del año 2004. Ricard Albiñana es también administrador de Pelazorosa, otra productora que en el año 2020 facturó 27.525 euros y obtuvo 8.120 euros en beneficios y en 2019 facturó 16.389 euros y ganó 9.209.