CaixaBank cierra el primer trimestre del año con una rentabilidad sobre recursos propios (ROTE) del 15,8% que espera llevar "por encima del 16%" a final del ejercicio, lo que quiere decir "que esperamos mejorar los resultados de 2024 sobre los de 2023", cuando el banco obtuvo un beneficio récord, superior a 4.800 millones de euros. Así lo ha puesto de relieve el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, en la presentación de resultados celebrada en Valencia este martes, donde ha preferido trasladar las previsiones de 2025 para dentro de siete meses.

"En noviembre presentaremos un plan estratégico a tres años, de 2025 a 2027, y queremos concentrar en esa fecha las previsiones", añadía. Pese a ello, el banco catalán ya ha dado algunas pinceladas para los próximos meses. Por ejemplo, esperan una mejora del margen de intereses de entorno al 5% este ejercicio, que en previsión de que los tipos empiecen a bajar ya no podrán mantener en 2025.

"Los tipos han sido mejor de lo previsto este año, habíamos dado una previsión de margen de intereses del mismo nivel de 2023, pero después de un trimestre más de tipos al alza y una mayor actividad de clientes, además de una buena evolución de actividad comercial, pensamos que podríamos estar en un crecimiento de dígito bajo o mediano, más o menos del 5% este 2024", señalaba Matthias Bulach, director de contabilidad de CaixaBank.

Gortázar señalaba que el margen de intereses del banco ha crecido un 27% entre enero y marzo, respecto al año pasado. Pero el crecimiento ha sido "más moderado" (del 1,5%) respecto al último trimestre. "Estamos llegando a un momento de estabilización y habrá caída más adelante por la perspectiva de tipos de interés a la baja".

El mercado predice entre dos y tres bajadas de tipos este año 2024, añadía el consejero delegado, que prevé que en Europa lleguen al 2,5% (desde el 4,5% actual) el año que viene y que el primer movimiento llegue junio.

Y esta caída, "evidentemente" tiene un impacto directo en el margen de intereses. En CaixaBank, "100 puntos básicos de caída suponen una sensibilidad del 5% al cabo de un año", por ello, anticipan que el margen no crecerá el año que viene.

Aunque el ejecutivo reconoce que hay poca visibilidad con la curva de tipos, ya que las previsiones han cambiado varias veces este año. "Los mercados esperaban seis caídas en 2024 y ahora esperan dos, o quizá una tercera, aunque no con toda probabilidad. También se esperaba que la FED bajara primero los tipos y siguiera el BCE, pero ahora parece que primero será el BCE. El panorama es bastante difícil de predecir".

En todo caso, Gortázar aseguraba que el Banco Central Europeo no va a llevar al sector financiero a la situación de tipos cero y negativos vividos tras las crisis.

Asimismo, el banco prevé que la morosidad, donde ya han notado un ligero repunte en marzo frente a diciembre, del 2,7% al 2,8%, se sitúe a cierre de año en el 3%.