En España había 1,99 millones de jugadores online activos al cierre de 2024, lo que supone un incremento del 21,6% sobre el año anterior que, en términos absolutos, implica que se sumaron al mundo del juego y las apuestas digitales 459.250 personas, según la Dirección General de la Ordenación del Juego (DGOF) No obstante, en términos netos, el número de jugadores crece en 354.200, pues unas 105.000 han dejado el juego virtual. A finales de 2023, constaban registrados 1,64 millones de personas activas en los juegos digitales.

El informe del Perfil del Jugador Online 2024, publicado esta semana, señala que el 83,15% de los jugadores son hombres; el 85,7% están entre 18 y 45 años y de media juegan cada mes 950.000, con un tiempo medio de actividad de 5,74 meses. Un 22%, sin embargo, solo están activos durante un mes o incluso menos. El organismo responsable del juego no informa directamente del dinero que se gastan estas personas en el juego virtual; aunque sí de forma indirecta, porque para poder jugar online, hay que inscribirse en las plataformas online. Lo que permite un seguimiento detallado del mundo del juego virtual en España.

En estas plataformas, los jugadores depositan fotos que les dan acceso a los juegos online. El pasado año, la totalidad de los depósitos sumaron 4.568 millones de euros, con los que se hicieron operaciones por 3.141 millones de euros. Esta retirada total equivale al dinero gastado en juego virtual durante el pasado año y es casi un 20% más que en 2023, año en el que se retiraron 2.622 millones de euros para gastar en juegos digitales. Por su parte, las operadoras virtuales del juego ingresaron 1.455 millones de euros el año pasado, un 17,6% más que en 2023. El resto se destinó a premios

Entre las cuatro modalidades de juego online. Gana por goleada las apuestas, con 1,57 millones de personas son aficionadas en España, lo que arroja un incremento del 25,4% respecto a diciembre de 2023. El casino, con 1,14 millones, es el segundo juego con más seguidores y un aumento cercano al 30% en el último año; al póquer online juegan 394.900 personas, un 13% de subida, y al bingo digital casi 92.000, un 1,7% más que en diciembre. Porque cerca de la mitad de los jugadores online no se limitan a uno solo.

2.741 euros al año

El año pasado, el gasto medio por jugador activo (registrado en las plataformas) fue de 706 euros, un descenso de 26 euros sobre el año pasado (-3,5%). Los hombres, además de ser mayoría en el juego online, también gastan más: 740 euros al año, por 538 de las mujeres. Por tramos de edad, el mayor gasto, de 1.146 euros al año, corresponde al tramo de 46 a 55 años y el menor, con un gasto anual medio de 299, a los comprendidos entre 18 y 25 años.

No obstante, el informe diferencia entre los que están registrados (1,99 millones a 31 de diciembre) de los que han depositados fondos (1,84 millones) y de los que realmente han jugado -han retirado fondos- a lo largo del pasado año, (1,14 millones). Con esta perspectiva, más realista, el número de personas que jugaron el pasado año creció un 23,2% e hicieron un desembolso medio de 2.741 euros (2,7% de descenso sobre 2023). Y de media, jugaron 21 veces durante el año.

Un negocio disparado

El juego online crece de forma exponencial en todos los conceptos. Si comparamos con el año pasado, el número de personas registradas en las plataformas de juego online ha aumentado un 21,6% (el 23,2% si nos limitamos a los que jugaron realmente a lo largo del pasado año). El dinero destinado al juego, si bien es cierto que cayó el 3,2% (26 euros), sigue siendo muy alto, pues 2023 fue un año de inflexión, pues el gasto creció 152 euros, en porcentaje el 26%. Lo que explica que el dinero gastado en España en juego online se haya disparado el pasado año el 20%.

Pero las cifras son más espectaculares si las analizamos desde la pandemia. En 2019, había registrados en las plataformas 1,36 millones de españoles, lo que supone un aumento de 625.160 personas, un 45% más, y el gasto medio anual se ha elevado de 512 euros a 706 (194 más), equivalente al 38%. Eso hace que el gasto en juego online haya aumentado en seis años en 1.903 millones de euros, un 153% o expresado de otra manera, se ha multiplicado por 2,5 veces.

Un crecimiento que se explica por una extensión en el perfil de jugador online. Aunque ligeramente, la mujer se incorpora cada vez más, pues ha ganado una ligera cuota, del 16,6% del total en 2019, al 16,8% el pasado año. Con las edades, sin embargo, se está produciendo una mayor concentración de los jóvenes. Así, la generación de 18 a 25 años suma ya el 34,2% del total, siete puntos más que en 2019. El resto de los rangos ha descendido: los de 26 a 35 reducen 2,7 puntos porcentuales (pp) su peso en el total de los jugadores online; los de 36 a 45 caen 2,5 pp; entre 46 y 55 años pierden 0,1 pp; 0,7 pp la siguiente cohorte y los de más de 65 años suman 22.900 -500 más que en 2019-, aunque en el cómputo ceden medio punto porcentual.

Resultados ruinosos

El informe también aporta una interesante información sobre los premios. En 2024, de los 1,99 millones de jugadores registrados, 1,52 millones (76,3%) tuvieron pérdidas que sumaron en conjunto 1.750 millones de euros y 423.214 obtuvieron (21,2%) beneficios con el juego online; en total, 343 millones de euros. Un 2,45% ni ganaron ni perdieron.

Pero con un dato demoledor. El 5% del total -algo menos de 100.000 personas- acumularon el 64% del total de las pérdidas, en conjunto, 1.120 millones de euros, con una media de 11.250 euros al año. En concreto, el 80% del total de las pérdidas -1.590 millones de euros- se concentró en el 10% de los jugadores. El pasado año, 139.290 (7%) personas perdieron más de 3.000 euros, y solo superaron ese dinero en ganancias 20.784 jugadores (1% del total).