“Por primera vez en la historia, Barcelona pone límites a los cruceros”. Así lo afirmó el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, del 17 de julio, el día que el Ayuntamiento y el Puerto de la ciudad firmaron un protocolo para reducir las terminales de cruceros de 7 a 5. Barcelona afronta esta reducción desde una posición líder en Europa (primer puerto por número de cruceristas, por encima del puerto romano de Civitavecchia) y sexto en el mundo en movimientos de pasajeros. Con un aumento de los visitantes que entran por el puerto, que no ha parado de crecer hasta los 3,6 millones en 2024, con un aumento del 2,4% respecto al año anterior, aunque el romano aumentó su número el 4,3%. Aunque este año el incremento se dispara al 15,7%. Solo hay cinco puertos en el mundo por delante de Barcelona, todos ellos del Caribe.
El profesor Daniel Imbert-Bouchard cree que Barcelona “no puede crecer indefinidamente”, pero calcula que los efectos de la reducción de terminales no se notarán de manera inmediata. En 2024, Barcelona se situó como sexto puerto de cruceros del mundo con 3.655.981 movimientos de pasajeros, según datos del Puerto, que siguen el estándar internacional. Se trata de un crecimiento del 2,4% respeto el año anterior, por debajo de los principales puertos de Europa.
A nivel mundial, por delante de Barcelona hay cinco puertos caribeños: el de Miami, en Florida (EE. UU.), es el más transitado del mundo en cuanto a cruceristas, según ha confirmado a ACN, con 8,2 millones entre octubre del 2023 y el septiembre del 2024. De hecho, el puerto usa el lema “Cruise Capital of the World” (la capital mundial de los cruceros) y sumó un 12,8% más de afluencia que en el mismo periodo del año anterior. El puerto Cañaveral, también en Florida, es el segundo del mundo, con 7,6 millones de usuarios (+11,8% de aumento en 2024); tras ellos, Nasáu (Bahamas), con 5,6 millones el 2024 (+26% respecto al 2023) y el de Cozumel (México), que sumó 4,6 millones el año pasado (+13%). El de Everglades, también en Florida (EE. UU.), ocupa el quinto lugar mundial (4 millones).
Europa
En Europa, el liderazgo de Barcelona es, no obstante, amenazado por el de Civitavecchia (Roma) con 200.000 cruceristas menos. Tras estos dos se coloca Southampton (Inglaterra) con 3 millones de pasajeros el año pasado (+15,4% anual), que lidera el norte del continente. Enel Mediterráneo, Marsella, en la Costa Azul francesa, es cuarta con 2,4 millones (-5,6%), y Palma de Mallorca, quinta (1,8 millones y un descenso del 3%). El conjunto de los puertos de las Islas Baleares suma dos millones y medio de cruceristas, por debajo de los 3,2 millones de la suma de puertos de las Islas Canarias.
Los puertos de Nápoles (1,7 millones), el Pireo, en Atenas (casi 1,7 millones), Génova (1,5 millones), Santorín (1,35 millones) y Hamburgo (1,3 millones) completan el 'top 10' europeo. Mykonos (1,29 millones) y Kiel (1,2 millones) cierran la lista de los puertos que superaron el millón de cruceristas el año pasado. En conjunto, unas cuarenta ciudades recibieron más de medio millón de pasajeros, según datos oficiales de cada autoridad y de la asociación de puertos cruceristas mediterráneos MedCruise, que sitúa también Barcelona –uno de sus puertos asociados– en primer lugar del ranking con 3,6 millones de pasajeros, en la línea de los datos que proporciona el Puerto.
Posición estratégica
Daniel Imbert-Bouchard, profesor el CETT Barcelona School of Tourism, Hospitality and Gastronomy, un centro adscrito a la UB, señala los factores que hacen de Barcelona el primer puerto de cruceros de Europa. Por un lado, la relevancia turística de la ciudad y su posición en el Mediterráneo, factores a los que se suman su conexión con el aeropuerto y otras redes de comunicación con el resto del Estado y del continente y la infraestructura que se ha creado los últimos años alrededor de los cruceros. Además, Imbert-Bouchard destaca que el puerto está mucho más cerca de la ciudad que en el caso otras capitales, como por ejemplo los de Roma y Atenas.
Por su parte, el director de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), Alfredo Serrano, destaca el atractivo turístico de la capital catalana y la buena conectividad aérea con los Estados Unidos. "Se produce una relación simbiótica. Los cruceros empezaron a ir a Barcelona, esto mejoró la conectividad con Norte-América, lo cual ha hecho que vinieran más americanos y las aerolíneas a abrir más y más rutas", explica en declaraciones a ACN. Además, Serrano pronostica que con la futura ampliación del aeropuerto del Prat se podría repetir el fenómeno con el Oriente Medio.
Ralentización del crecimiento
No obstante, de los grandes puertos mundiales, el de Barcelona registró el año pasado el menor crecimiento el año pasado, pero también respecto del romano, que acorta distancias. La instalación italiana ha sido la segunda los últimos años, sumando 3,45 millones de pasajeros el año pasado, pero con un aumento de pasajero del 4,3%, frente al 2,4% de Barcelona. Algunos medios locales italianos se han hecho eco del anuncio de reducción de terminales en la capital catalana y apuntan que esto puede colocar Civitavecchia como líder del sector a escala europea en el futuro.
De hecho, el director de CLIA apunta al puerto italiano como el principal competidor de Barcelona. “Evidentemente, Roma también es una ciudad con enormes atractivos turísticos”, recuerda Serrano, a pesar de que -puntualiza- no tiene la misma conectividad aérea con Estados Unidos que Barcelona.
El ritmo de crecimiento del puerto barcelonés el pasado año 2024 también fue inferior respeto otros puertos. Livorno (Italia), Heraklion (Grecia) o Warnemünde (Rostock, Alemania) registraron incrementos anuales de más del 25%, mientras que solo una decena de los 40 puertos principales tuvieron menos pasajeros que el 2023.
Mejora en 2025
No obstante, en 2025, las instalaciones de Barcelona están creciendo con mucha más fuerza, un 15,7% más de movimientos de cruceristas durante los primeros seis meses del año, y ya en suma 1,7 millones. Aunque, según fuentes del puerto, estas cifras "no reflejan la cifra real de cruceristas que llegan a la ciudad", que la sitúan en 1.002.077 visitantes en el mismo periodo, un 13% anual más. Este último dato sale de un nuevo sistema de cálculo del Puerto de Barcelona con Turismo de Barcelona, que "homogeneiza" los registros, según explicaron el mes de junio. El crecimiento de este año, a pesar de ser destacable, no llega a los niveles del conjunto de las Islas Baleares (+29% hasta abril), de los de la provincia de Las Palmas (+63,1% hasta marzo) o de los de la provincia de Santa Cruz de Tenerife (+34,9% hasta junio). La capital catalana está a niveles de crecimiento similares a Palma, e inferiores a puertos como Arrecife y el de la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, en las Canarias.