El año pasado, el 75% de los 9,5 millones de pensionistas contabilizados por la Agencia Tributaria (AEAT) tuvieron unos ingresos inferiores al salario medio que se colocó en 26.489 euros. De media, los 9,5 millones de personas que percibieron algún tipo de pensión -tanto pública como privada-, obtuvieron unos ingresos medios de 17.353 euros al año si se contabilizan aquellas personas que han compaginado una pensión (generalmente un subsidio, más que una contributiva) con algún otro ingreso como un trabajo. Si nos centramos en los 8,72 millones que solo ingresaron una pensión, la renta media asciende a 17.748 euros. Así se desprende de la estadística sobre el mercado de trabajo y pensiones publicado recientemente por la Agencia Tributaria, obtenidos de la declaración de la renta de los españoles que analiza otras fuentes, además de los datos del Ministerio de Integración y Seguridad Social que se limita a contabilizar las pensiones que abona.

No obstante, el año pasado, la renta anual de 1,75 millones de pensionistas sobrepasó los 35.800 euros de ingresos anuales, lo que supone el 18,2% de los 9,5 millones contabilizados por Hacienda, que aclara que su estadística incluye a personas que han recibido a lo largo del año pasado retribuciones declaradas en la Renta en la clave B (pensionistas y perceptores de haberes pasivos), es decir, las percepciones no exentas del IRPF correspondientes a las pensiones y haberes pasivos de los regímenes públicos de la Seguridad Social y clases pasivas, así como las que correspondan a las demás prestaciones, ya sean públicas o privadas, dinerarias o en especie. La AEAT también califica como pensionistas a las personas que cobran las prestaciones por incapacidad permanente o gran invalidez que estén exentas de tributar y las pensiones por inutilidad o incapacidad permanente de clases pasivas.

Pero a diferencia de la estadística de la Seguridad Social, la de Hacienda no incluye a los residentes en el País Vasco y Navarra de los que desconoce sus datos al tener transferida la fiscalidad por el régimen foral. Lo cual es un hándicap, pues estos dos territorios tienen las pensiones más altas del sistema de la Seguridad Social. También desvirtúa la comparación en el número de pensiones públicas de la Seguridad Social y las contabilizadas por la AEAT. La primera abonó este noviembre prestaciones contributivas a 9,51 millones de personas, aunque abona 10,1 millones de pensiones. Lo que significa que casi 600.000 personas reciben más de una pensión pública de la Seguridad Social. Por ejemplo, jubilación y viudedad, que es el caso más corriente. De hecho, la media de prestaciones recibidas es de 1,105 por pensionista, según la Seguridad Social.

Hacienda contabiliza que de media cobraron pensiones de cualquier modalidad 9,6 millones, a los que habría que sumar otros 650.000 pensionistas vascos y navarros, lo que arroja un número de 10,2 millones de personas que reciben algún tipo de pensión, de los que 700.000 no ingresan dinero de la Seguridad Social. Por este motivo, la media de pensiones se eleva a 1,12 en el caso de Hacienda.

El número de pensiones es el principal determinante para tener mayores o menores ingresos si se tiene en cuenta que hay, siempre según Hacienda, 10.329 personas que reciben una media de 2,56 pensiones, con unos ingresos medios de 163.637 euros año; otros 11.461, con 2,5 pensiones y unos ingresos de 81.431 euros; 76.654 con 2,27 pensiones que rentan 55.508 euros al año, y 75.142 con 2,05 pensiones que les aportan 45.129 euros anuales. No obstante, no siempre hay una relación directa entre el número pensiones que se cobran y los ingresos percibidos. Como ejemplo, en la provincia de Barcelona la pensión media que cobran 1,27 millones de personas se sitúa en 19.109 euros, con 1,17 pensiones. Sin embargo, Lleida, con 1,2 pensiones, tienen una renta inferior, de 16.405 euros. Tarragona se coloca en segundo lugar, con 17.481 euros de ingresos medios obtenidos con pensiones, y Girona, 17.370. En este sentido, influye el otro gran factor que determina la pensión: los salarios por los que se ha cotizado o el capital invertido en fondos privados.

Comunidades autónomas

Con los datos de la AEAT, que deja fuera a País Vasco y Navarra, la Comunidad de Madrid tiene la pensión media más alta, 20.824 euros, con un salario medio de 33.052 euros y, a continuación, Asturias, con unos ingresos por pensiones de 20.274 euros -debido al alto número de pensionistas que cobran por el régimen del carbón, el más alto de toda la Seguridad Social- y un salario medio de 26.853 euros. Catalunya se sitúa en tercer lugar, con una pensión de 18.617 euros frente a un salario de 29.056. La pensión media en 2022 en Aragón fue de 18.577 euros, mientras que su salario alcanzó los 25.414 y el top-5 lo cierra Cantabria, con una pensión de 18.341 y un salario de 24.272.

Los pensionistas de Castilla y León tienen una renta anual de 17.500 euros con un salario de 24.828 euros, según AEAT; La Rioja, una pensión de 17.344 y un salario de 24.424; Baleares, 16.765 euros de pensión y 23.322 de salario; la Comunidad Valenciana, unos ingresos por pensiones de 16.184 euros y un salario de 24.491; la Región de Murcia, 15.797 de pensión y 23.162 de salario y en Andalucía, 15.766 de pensión y 23.005 euros de salario.

En Castilla-La Mancha, la pensión media fue de 15.616 euros y el salario 23.431; en Galicia, 15.491 euros de pensión y un salario medio de 24.795; Canarias, 15.481 y 22.847 de salario y, finalmente, Extremadura con unos ingresos medios por pensión de 14.520 euros y un salario de 21.142. Cabe recordar que en los territorios con menores cotizaciones por salarios más bajos, la pensión se compensa con el complemento a mínimos, recortando la diferencia entre pensión y salario.