Puede que el sueño de hablar con momias o los faraones del pasado sea una expectativa que se cumpla sólo en las producciones cinematográficas, sin embargo, una autopsia digital hecha al faraón Amenhotep I nos dirá información que hace unos 20 años era imposible de saber sobre fallecidos milenarios.

La momia real de Amenhotep I fue descubierta en el siglo XIX, sin embargo, se encontraba perfectamente preservada para evitar que se dañara. Un escáner digital ha podido saciar las dudas de arqueólogos que nunca abrieron tal cuerpo (con más de 3.500 años de muerto) para no dañarlo.

Tumba del faraón Amenhotep I

Tumba del faraón Amenhotep I

El cuerpo de Amenhotep I había sido decorado con guirnaldas de flores, y con la cara y el cuello cubiertos por una exquisita máscara funeraria con incrustaciones de piedras de colores.

¿Qué ha permitido escanear?

Bajo el nombre de CT (tomografía axial computarizada) se han podido conocer los detalles de la anatomía de la momia. La información salió por primera vez a la luz a través de la revista Frontier In Medicine.

Faraón Amenhotep I

Faraón Amenhotep I

Hallazgos sobre el faraón Amenhotep I

La revisión digital ha mostrado que, pese a la conservación que se ha tenido de la momia en el mundo moderno, desde que el rey falleció, hubo una abertura del cuerpo o de la tumba en el siglo XI a.C. Además, se dice que Amenthotep I fue enterrado dos veces después de su muerte.

Amenhotep I tenía unos 35 años de edad en el momento de fallecer. Tenía una altura de aproximadamente 1,69 centímetros. Se encontraba circuncidado y tenía una dentadura bastante atractiva.

Desde el punto de vista de la Facultad de Medicina de la Universidad de El Cairo, se pudo asegurar que contaba con una barbilla estrecha, tenía nariz pequeña, el cabello rizado y los dientes de la parte superior, eran ligeramente protuberantes.

Algo que no ha podido determinar el escaner ha sido la causa de muerte. No se encontraron heridas o zonas que demuestre que existía una enfermedad aparente en el faraón. Se dice que post moretm se ejecutaron algunas mutilaciones hacia el cuerpo, pero no se perdió ni la estructura de su corazón o cerebro.

La tecnología está permitiendo que ocurran fenómenos que en el pasado eran impensables.