Culpable. La Audiencia Nacional, de acuerdo con la Fiscalía y la defensa de Hamza Waris, el terrorista pakistaní que el Miércoles Santo de 2024 atacó con un hacha un restaurante de McDonald's de Badalona, en el centro comercial Màgic, lo ha declarado culpable y le ha cambiado la pena de prisión —para la que se pedían cuatro años y seis meses— por la expulsión inmediata del Estado y el pago de más de 7.000 euros por los desperfectos que causó cuando atacó con violencia este establecimiento americano para, según aceptó él mismo, cargar contra los intereses americanos y de Israel por la respuesta militar que estaba haciendo el ejército hebreo por los ataques de Hamás el 7 de octubre de 2023.
Además de ahorrarse seguir en prisión, donde se encuentra desde 2024 -cuando fue detenido por los Mossos d'Esquadra tras ser retenido allí mismo y haberse registrado su casa- también se ha dejado sin efecto la inhabilitación para trabajar en el ámbito educativo y el periodo de libertad vigilada de cinco años que el acusado habría tenido que cumplir una vez extinguida la condena. Con esta resolución, todas las partes han dado por cerrado el procedimiento judicial y el magistrado de la Audiencia Nacional que ha llevado el caso ha leído la sentencia de viva voz y ha ordenado la expulsión del terrorista “inmediatamente”.
Los hechos se remontan al 27 de marzo de 2024, cuando el hombre, de origen pakistaní y que se encontraba en situación irregular en España, accedió al centro comercial Màgic de Badalona armado con un hacha de grandes dimensiones. Antes de actuar, se colocó un pañuelo palestino en el cuello, hecho que la Fiscalía y el juez instructor interpretaron como una “liturgia previa”, y se dirigió a la zona de restauración en un momento de gran afluencia de público. Una vez en el interior del establecimiento de comida rápida, golpeó varios expositores y una pared de espejos, rompiendo cristales y provocando “un clima de terror e histeria colectivos entre las personas que en aquel momento estaban en el interior”.
Radicalizado con vídeos de Gaza
El hombre fue reducido por un ciudadano y por un agente de los Mossos d'Esquadra fuera de servicio hasta la llegada de refuerzos policiales. Posteriormente, ya bajo custodia, manifestó que había actuado “después de haber visto en el teléfono móvil imágenes de niños palestinos muertos en manos de americanos, en una especie de acto de represalia”. Los daños materiales causados en el establecimiento fueron valorados pericialmente en 7.602,74 euros, y el juzgado de instrucción de Badalona decretó su ingreso en prisión provisional, una medida que posteriormente ratificó la Audiencia Nacional. Según la Fiscalía, el acusado había experimentado un proceso de radicalización previa vinculado a la causa palestina y al yihadismo, había buscado contenidos relacionados con el martirio y la violencia, e incluso había grabado un vídeo de despedida dirigido a su familia en Pakistán, una conducta que los investigadores de la Comisaría General de Información de los Mossos vincularon con el perfil de los llamados muyahidines o lobos solitarios. Estas circunstancias llevaron al ministerio público a calificar el ataque como un delito de daños con fines terroristas.