La alcaldesa de Sant Cugat, Mireia Ingla, anuncia medidas económicas de ayudas al alquiler, subvenciones a las personas autónomas y empresas que trabajan para el Ayuntamiento y en el comercio local. Estas ayudas se aprobarán en las próximas semanas, ante las consecuencias económicas que originará el estado de alarma que ha declarado el gobierno del Estado y las medidas de confinamiento de la población.

El Ayuntamiento anuncia una serie de medidas que se irán aprobando e implementando las próximas semanas, en concreto, este paquete de medidas va encaminado a reforzar tres ámbitos: la vivienda de alquiler, el comercio y empresas y autónomos que trabajan para el consistorio.

La alcaldesa, Mireia Ingla, también hace una petición a los propietarios de vivienda y de locales comerciales que los tienen en alquiler a fin de que colaboren para superar las consecuencias económicas de la crisis: "Hacemos un llamamiento a la solidaridad para priorizar la cohesión social de Sant Cugat por delante de las ganancias económicas".

Además, la alcaldesa pide al gobierno del Estado y a su presidente que levante las medidas de estabilidad presupuestaria y la regla del gasto a fin de que los ayuntamientos puedan hacer frente a los gastos originados por la crisis del coronavirus y a la reducción de ingresos que sufrirán las administraciones locales.

Vivienda de alquiler

El Ayuntamiento abrirá una línea de subvenciones y ayudas al alquiler para familias con menos recursos y dificultades económicas que viven en viviendas públicas de Promusa y privadas de alquiler.

Comercio

Se abrirá una línea de ayudas y subvenciones destinada a compensar la tasa de terrazas, la tasa de recogida de basura comercial y el importe del tributo metropolitano del Área Metropolitana de Barcelona (AMB).

Empresas y autónomos que trabajan para el consistorio

Se indemnizará económicamente a las empresas y personas autónomas que trabajan para el Ayuntamiento y que han visto suspendidos sus contratos en razón de causa mayor.

Pago de facturas

Se adelantará el pago de las facturas de autónomos y pequeños y medios comercios con el fin de dotarlos de liquidez lo antes posible, ante la reducción de ingresos que sufrirán.