"Qué está haciendo la justicia para detener eso"?, reclama Xavier M., a uno de los vecinos de la urbanización de Pineda de Mar que está atemorizada por un ladrón. En una semana le han entrado tres veces en casa y se la han vaciado. Se le han llevado todo. Incluso el cubo de basuras. "Estoy enfadado", dice Xavier. La casa que tiene en PineMar es una de las que sale en el mapa de robos investigados por los Mossos y que publicó El Nacional. La madrugada del 13 al 14 de febrero un vecino vio movimientos sospechosos en la casa de al lado. El propietario estaba en Andorra. Recibe la llamada del vecino y, alertado, avisa a la policía local de Pineda de que cuando llega ya no encuentra a nadie. Aquella misma noche los ladrones volvieron. Xavi, el propietario, recibe una llamada de los Mossos a la una y media de la madrugada. Han detenido a dos mujeres y un hombre que estaban en su casa. Llevaban una furgoneta llena de objetos. La gran mayoría eran suyas, las reconoce cuando acude a comisaría.

La casa tiene dos plantas con entradas independientes. El domingo por la mañana llega y ve cómo está toda revuelta. En la parte de arriba han entrado por la ventana y han reventado la cerradura, aunque no han podido abrir. Abajo, entran por la puerta principal. Dentro de la casa hay bolsas y maletas llenas de ropa que los ladrones han dejado a punto para llevarse y que tienen que dejar en las habitaciones porque la policía los sorprende.

Durante toda la semana Xavier se ocupa de hacer arreglar las cerraduras, de poner las denuncias y de hacer los trámites pertinentes con la aseguradora. Pero horas después de hacer ir al cerrajero, el sábado por la mañana, se vuelve a encontrar la casa saqueada. La cerradura no está forzada. Los ladrones han entrado por una reja metálica. Sólo él tiene la llave. Una llave maestra que han encontrado en el robo de la semana anterior y han utilizado para entrar. "Todavía no he conseguido arreglar las puertas y ventanas y el tio ya ha entrado y salido 2 veces más!", exclama mientras explica su caso entre airado y desesperado.

Televisores, perfumes y cubos de basura

Telas, perfumes y cubos de basura. El ladrón de PineMar no tiene manías y se lleva todo lo que encuentra. Todo. En algunas de las denuncias hay entre el material robado televisores, aspiradores, consolas, tostadoras, máquinas de afeitar, la tostadora, la plancha , bicicletas ... Objetos con valor para poder revender los mercados de segunda mano que últimamente han proliferado con mucho éxito también en internet. Pero lo que también existe entre los objetos robados, y lo que sorprende más a los investigadores son cosas como puzzles de 500 piezas, cables de todo tipo, productos de limpieza, maquetas para montar, perfumes e incluso el cubo de la basura y una botella de whisky casi vacía. También han dejado prendas. En una casa han encontrado ropa que no era de los dueños y dos colillas de cigarrillo.

También han dejado prendas. En una casa han encontrado ropa que no era de los dueños y dos colillas de cigarrillo.

Impotentes

Xavier ha presentado tres denuncias a la policía. Ha intentado ver al juez para que le explique en qué proceso está su caso. "El jueves me presenté en los juzgados pero no me hicieron ni caso". La única respuesta ha sido: "Eso tiene que hacer su curso. Contrate a un abogado".

"La justicia tendría que ser objetiva", dice Xavier a El Nacional. Se está planteando una recogida de firmas que denuncie esta situación de indefensión en la que se encuentran los vecinos. Admite que "es muy difícil en una urbanización tan grande -hay 500 casas- encontrar in fraganti a los ladrones". Y si después de que la policía los haya detenido "no pasa nada, ¿qué justicia tenemos?", se pregunta.

"Hablé con los Mossos y estaban desesperados", asegura. La policía investiga robos en nueve casas de PineMar las últimas semanas, una de ellas la de Xavier. Consiguieron detener al ladrón después de prácticamente suplicar una orden de registro y hacer una guardia de 24 horas, y una vez hubo declarado ante la jueza, lo dejó en libertad. Tres días después volvía a comisaría, pero salía tal como había entrado. Los investigadores admiten que sin la colaboración de la justicia no hay nada que hacer. Ahora mismo hay dos juzgados investigando los hechos que afectan al mismo ladrón. El juzgado de instrucción número 1 de Arenys y el número 6.  

Xavier M. es uno de los vecinos que tiene la casa en PineMar como segunda residencia. Sólo va por vacaciones. Y al enfado que tiene por los robos se le añade la preocupación de los okupas. En la zona también hay y teme que se le instalen en casa, como hizo el ladrón hace un tiempo, que se instaló a vivir en una casa de la misma urbanización donde cada día hace su agosto.

Dos juzgados y dos ladrones

Los juzgados de instrucción número 1 y el número 6 de Arenys investigan los robos de la urbanización Pinemar. A raíz de las denuncias se desprende que ahora mismo habría un mismo grupo de ladrones entrando en las casas. Dentro de este grupo hay J.R.R, que acumulua 25 antecedentes, J.M.D, que habría entrado tres veces en una misma casa. Y dos mujeres que los acompañan habitualmente. El juzgado número 1 es el que investiga el ladrón multirreincidente que ha estado en la cárcel y al que se le imputan la mayoría de robos. Es el que tenía 145 objetos acumulados en casa y que quedó en libertad porque según la juez no se pudo demostrar que los había robado él porque la casa donde los encontraron no iba a su nombre.

El juzgado número 6 tiene dos causas acumuladas de J.R.R. En este caso el juez decide dejarlo en libertad porque ninguna de las partes, ni siquiera la fiscalía, pide la prisión provisional. Este mismo juzgado es el que investiga el triple robo en la casa de la calle Rodin. En estos momentos el juez está citando a varios testigos y la investigación continúa abierta. Fuentes de la investigación explican a El Nacional que las víctimas reconocen todos sus objetos "sin lugar a dudas" cuando van a comisaría. Esto debería reforzar la imputación de los robos por parte de los Mossos y conseguir medidas cautelares como la prisión provisional. Una prisión que deben dictar los jueces de los juzgados de instrucción 1 y 6 de Arenys. En ninguna de las detenciones, sin embargo, que se han hecho hasta ahora lo han considerado oportuno.