Lluvia de denuncias contra el Instituto del Teatro por su actuación ante la revelación de las acusaciones de acoso sexual y maltratos por parte de al menos tres docentes.
Decenas de personas se han concentrado delante del edificio del Instituto, exigiendo responsabilidades por la falta de medidas tomadas en la prevención y la actuación ante el acoso sexual.
Los testimonios de más de 100 afectados
Desde las denuncias de un centenar de alumnos y exalumnas publicadas en el diario Ara, el Instituto se ha visto forzado a activar el protocolo contra el acoso sexual (creado en el 2018) con el fin de investigar las acusaciones. A pesar de eso, han sido muchos los que han criticado la respuesta de la institución, a quienes acusan de llegar demasiado tarde y de encubrir los acosos de los cuales ya eran conscientes.
En la denuncia colectiva, más de 100 testimonios relataron los tocamientos, insinuaciones, insultos y amenazas que han sufrido los alumnos desde hace al menos 30 años, apuntando directamente a tres docentes: Joan Ollé (que todavía trabaja), Jorge Vera y Bery Tovías.
A pesar de eso, no ha habido ninguna denuncia formal presentada contra los acusados. Desde la dirección del Instituto, alegan que es precisamente debido a eso que no han cesado en Ollé, hecho que ha encendido una lluvia de críticas online y presencialmente en el Instituto, donde un grupo de personas se ha manifestado este mediodía.
Exigen responsabilidades
Entre los reclamos de los críticos con la respuesta del Instituto, se pide la dimisión de la directiva y la condena directa de los acosadores por parte de la institución. Además alumnos y exalumnos han acusado en el Instituto de estar al corriente de los acosos y maltratos desde hace tiempo, y que la creación e implementación del protocolo ha venido demasiado tarde.
En definitiva, centenares de afectados y conocedores de los acosos denuncian el encubrimiento de los perpetradores de manera sistemática por parte del Instituto.
Por su parte, el Instituto ha anunciado la puesta en marcha del protocolo de acoso del centro y han querido trasladar la suya "absoluta repulsa y todo el apoyo y solidaridad con el alumnado que haya podido sufrir este tipo de situaciones". A pesar de estas declaraciones, de momento todavía no se han pronunciado sobre un posible despido del acusado Joan Ollé.