El Congreso de los Diputados ha decidido aplazar la comparecencia de un agente de la Policía Nacional a la comisión sobre los atentados del 17-A, prevista para este martes. Según la ACN, fuentes parlamentarias han expuesto que el motivo es que el Ministerio del Interior ha remitido una carta solicitando medidas adicionales de seguridad para proteger su identidad. Esta petición requiere una reunión de la Mesa y de la Junta de Portavoces, que se reunirá este mismo martes, además de gestiones con la policía del Congreso y el Departamento de Comunicación. De esta manera, se ha desconvocado la sesión de mañana, donde tenían que comparecer este agente y el exjefe de la división de contraterrorismo de Girona y actual secretario general del CNI, Luis García Terán.
Las comparecencias delante de este órgano empezaron el pasado mes de noviembre, cuando el exdirector del CNI Félix Sanz Roldán señaló que el imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, "nunca fue ni colaborador ni informador" del espionaje español y negó que los servicios de inteligencia pudieran haber evitado los ataques a Barcelona y Cambrils. Sin embargo, sí que admitió que el CNI visitó al imán a la prisión de Castellón en el 2014, donde estaba ingresado por tráfico de drogas, dentro de sus tareas de prevención de actuaciones yihadistas, pero rechazó dar más detalles alegando que esta información estaba clasificada.
A finales de diciembre, el Consejo de Ministros levantó el secreto de los datos sobre Se Satty y acabaron descartándolo como eventual colaborador al no conceder "ninguna fiabilidad" en los diversos informes que enviaron al Congreso. Pero a raíz de las nuevas informaciones publicadas desde entonces, Junts y ERC pidieron hace unas semanas que Sanz Roldán volviera a comparecer al Congreso para aclarar los supuestos pagos del servicio secreto al imán de Ripoll considerado el cerebro de los atentados 2017. Más tarde se revelaría que el CNI pagó 500 euros mensuales a Se Satty como confidente de los atentados. Un dato que contrasta con la información aportada por Sanz Roldán durante su comparecencia a la comisión de investigación sobre el 17-A en noviembre, cuando afirmó que el imán "nunca" fue "colaborador ni informador del CNI".
Esta información se añadía a la declaración por parte de uno de los condenados por la Audiencia Nacional por los atentados que aseguraba que "el CNI tenía conocimiento de las intenciones que tenía el imán y permitieron que viniera y nos calentara la cabeza".