La secretaria general de ERC y portavoz de Junts pel, Marta Rovira (Vic, 1977), hace una valoración positiva de este primer año de Govern de JxSí y se declara optimista ante la perspectiva de cerrar un acuerdo con la CUP para los presupuestos. Donde no muestra una visión tan positiva es respecto a la reacción del Estado ante la decisión de convocar el referéndum. En este sentido, asegura que se está preparando la respuesta por si el Estado plantea "una situación límite".

Esta semana se ha cumplido el primer año de Gobierno de JxSí. ¿Qué valoración hace?
Una valoración positiva. Es un gobierno que está trabajando muchísimo. Concentrado, evidentemente, en poner las urnas en forma de referéndum para que los ciudadanos de Catalunya puedan decidir en qué país quieren vivir. Pero, además, un gobierno que tiene unas prioridades claramente sociales y que está respondiendo a las necesidades del país, a los retos de futuro, y a los retos de este mundo global.

En este momento en que la judicialización se intensificará muchísimo, tenemos que abrir los ojos y seguir adelante

¿Cuál ha sido el momento más difícil de este año?
No hay un momento difícil particular. Tenemos que abrir mucho los ojos ante estas reiteradas y constantes amenazas -porque creo que son amenazas directas- del Gobierno español, llevando al TC o a tribunales ordinarios decisiones políticas, instrumentos parlamentarios o directamente lo que se atreven a catalogar de delitos o presuntos delitos. Eso sólo pretende ser una amenaza o generar una situación de miedo para que los ciudadanos de Catalunya no puedan votar, decidir y avanzar. Ahora lo estamos sufriendo con más intensidad que nunca. Todo eso nos tiene que hacer recapacitar, hacer abrir los ojos y leer muy claramente el mensaje que nos están enviando desde el Gobierno español. En este momento en que la judicialización de la política se intensificará muchísimo, tenemos que abrir los ojos y tenemos que continuar adelante. En definitiva sólo nos tenemos a nosotros mismos utilizando la democracia y eso es lo que nos ha pedido a la gente.

Uno de los instrumentos que ya se ha acordado, y donde se dibuja cómo hacer el proceso de desconexión y el referéndum, es la Ley de Transitoriedad Jurídica. ¿Cuál prevé que será la respuesta del Estado cuando se apruebe?
No nos sorprenderá. Será la que nos tiene acostumbrados cuando intentamos cualquier cambio: el Estado que es inmovilismo en estado puro, lo para. Pasará con la ley de Transitoriedad lo mismo que ha pasado con el instrumento para luchar contra la pobreza energética, o la ley 24/2015, o todo lo que permite que el país avance. Nosotros seguiremos nuestro mandato, que interpretamos que nos habilita para continuar con la ley de Transitoriedad, aprobarla, que dé cobertura al referéndum, que es el mandato de las urnas. Por lo tanto nos sentimos habilitados. Cada vez que el Gobierno del Estado ponga sobre la mesa un expediente judicial que intenta parar e impedir que los ciudadanos de Catalunya voten, lo convertiremos en una reacción política.

Hasta donde cree que llegará el Estado en esta judicialización. ¿Puede llegar a la suspensión de la autonomía?
La suspensión de la autonomía es una situación jurídica que no existe, ni en el Código Penal ni en la Constitución, y eso lo explican muy bien los constitucionalistas que han comparecido en el Parlament. La suspensión de la autonomía, planteada como la plantea el Gobierno español, hace reír, es inconstitucional. La Constitución, tal como está concebida, es una fuente de derecho y autonomía. Para poder suspender la autonomía, primero tendrían que modificar la Constitución, porque se cargarían unos cuantos artículos, de facto. Por lo tanto, suspensión de la autonomía es igual a amenaza, como otras que tenemos encima de la mesa con múltiples formas. Nosotros seguiremos adelante, con los instrumentos democráticos, y eso no lo pueden parar.

Cada viernes, en el Consejo de Ministros, el Estado suspende un poco la autonomía de Catalunya

El Estado, sin embargo, tiene mecanismos y todavía se ha dotado de más, como la ley de Seguridad Nacional...
A veces lo digo para reír: cada viernes, cuando hay Consejo de Ministros, el Estado decide suspender un poco la Autonomía de Catalunya porque lo que hace, en el fondo, es intervenir. Interviene y decide por nosotros. Eso se ve en todos los ámbitos. El Estado nos interviene y nos suspende cuando suspende una ley de igualdad efectiva entre hombres y mujeres, que nos permite avanzar en una sociedad más justa, más igualitaria, más equitativa... Nos está suspendiendo la autonomía, nos está interviniendo, está decidiendo por nosotros. Hace lo mismo con la ley de pobreza energética, el impuesto de depósitos bancarios, el de los pisos vacíos... Parece que él determine.

¿Habrá referéndum?
No se contempla ningún otro escenario, referéndum o referéndum.

¿Y cómo se conseguirá para que no sea otro 9-N?
Este referéndum tiene que ser decisivo, la diferencia con respecto a la anterior legislatura es que esta vez puede ser decisivo. Tenemos un mandato democrático diferente que nos dice que podemos regular y aprobar todos los instrumentos y leyes para dar cobertura legal al referéndum. De aquí la ley de Transitoriedad, la regulación específica en referéndums, y la convocatoria en un decreto que debe ser inimpugnable porque se escapa de la cobertura constitucional.

Sin embargo, el Gobierno español no aceptará la máxima de que Catalunya se desentiende de la legalidad española. Es en este choque donde parece difícil ver la salida...
En este choque, yo siempre llevo la reflexión al 27-S y a unos programas electorales clarísimos, tanto de la CUP como de JxSí. ¿Qué hicieron el 27-S para impedir un mandato democrático legal y legítimo? Nos avisaron, pero no pudieron hacer nada, porque era un ejercicio claramente democrático la convocatoria de aquellas elecciones. Lo que no pueden ahora decir es que aquel mandato no lo podemos aplicar. La gente ha decidido, nadie ha dudado de aquellas elecciones, tenemos una mayoría política en el Parlament que nos permite implementar aquellos programas electorales...

Ejercemos la democracia, que es la única cosa que nos habilita. Seguimos adelante a pesar de querellas y amenazas

También se ha dicho que desde Catalunya no se aceptarán las inhabilitaciones y, en este punto, se destaca que será importante la respuesta en la calle. ¿Cuál ha de ser?
La respuesta que se está pidiendo a la gente es que ponga en valor el mandato democrático del 27-S, que nos habilita para llevar al Parlament los debates sobre la independencia, como nos habilita el reglamento del Parlament, que permite ordenar, arreglar y reglar la soberanía popular. Cumpliendo el reglamento, ni el TC ni el Gobierno español ni los otros grupos del Parlament se tendrían que poner con el contenido del debate. Es decir, que se desmarquen del contenido con argumentos políticos, que no vayan por la puerta de detrás a los tribunales. Entendemos que hemos ejercido la democracia, que la única cosa que nos habilita, que no es poco, es un mandato democrático legal y legítimo, y seguimos adelante a pesar de sentencias, querellas y amenazas.

¿Cómo?
Estando al lado del referéndum, de los ciudadanos de Catalunya, y la democracia. Y espero que aquí, en el ámbito de la democracia, del derecho a decidir, de la represión política contra la democracia, seamos muchos más que los que hoy somos, porque no podemos poner en juego la democracia de nuestro país.

¿Le ha sorprendido la respuesta del Estado español?
No. Hace años que estamos acostumbrados a ello. No nos sorprenden las actitudes poco democráticas del Gobierno español. Lo que sí me sorprendería, y por lo tanto deseo que no suceda, es que en el ámbito de la defensa de la democracia -y el referéndum es democracia- no nos encontremos ahí todos los demócratas. Y especialmente los demócratas que se dicen de izquierdas y saben que nuestro país necesita un cambio. Nos tenemos que encontrar todos ahí.

A los comuns se les espera en defensa de la democracia

El espacio de los comuns ya ha dejado claro que el referéndum tiene que ser pactado...
El espacio de los comuns tendrá que ir asumiendo que la democracia no se puede condicionar. La democracia se ejerce. Ante la negativa del Gobierno español de que exista un acuerdo político para un referéndum pactado, los ciudadanos de Catalunya han decidido ejercer la democracia. Por lo tanto, a los comuns se les espera en defensa de esta democracia. Los comuns no pueden asumir actitudes como las que ya vivimos la legislatura pasada, de condicionar sistemáticamente el ejercicio de la ciudadanía. Ya probamos el pedir permiso, ir a Madrid, pedirlo 18 veces en el Congreso de diputados... Podemos volver a hacer un esfuerzo, si algunos todavía se tienen que convencer de que una mayoría absoluta -porque hay absoluta en el Congreso de los diputados por lo que respecta a Catalunya- no habrá cambiado de opinión. Ya lo sabemos. Por lo tanto, el ejercicio de la democracia en nuestro país no se puede condicionar y limitar eternamente. En política, las decisiones se tienen que tomar.

No cerraremos nunca las puertas al diálogo; ahora bien, no esperaremos eternamente

¿En cualquier caso, ERC está de acuerdo con la voluntad expresada por Puigdemont en Madrid de negociar hasta el último momento y tanto como haga falta?
Siempre. Nosotros no somos los que hemos vetado el diálogo. Siempre lo habíamos reclamado. Vamos a negociar lo que nos han pedido los ciudadanos de Catalunya. No cerraremos nunca las puertas al diálogo; ahora bien, tampoco esperaremos eternamente a que este diálogo realmente sea sincero, honesto y asuma la situación en nuestro país. No podemos esperar eternamente.

La resolución sobre el referéndum dice que se celebrará, como a muy tarde, este septiembre, pero se ha dicho también que podría ser antes del verano...
La previsión es la misma que se anunció en la cuestión de confianza. Allí están los últimos acuerdos políticos entre JxSí y la CUP. Esta agenda es clarísima. Dice hasta junio-julio preparación y organización del referéndum, lo que llamamos estructuras de Estado, que son decisiones administrativas e importantes para consolidar y montar el referéndum, también la aprobación en el Parlament de todos los marcos legales que consideramos necesarios, como la ley de Transitoriedad. A partir de aquí, el mes de septiembre, referéndum, porque después de estudiar todos los escenarios y variables, nos pareció que el mes de septiembre es cuando estábamos más fuertes, más preparados y más a punto por poder organizar los referéndum con garantías y vinculante.

Una situación límite podría ser inhabilitar a Forcadell o Mas. Estas condenas nosotros no las podemos asumir

¿Pero se ha apuntado que puede haber cambios?
Estamos estudiando y nos estamos preparando para otros escenarios en que nos podamos hallar, no por voluntad propia, sino porque nos lleven ahí algunas de las decisiones políticas que toma el Gobierno español, la fiscalía, los tribunales... Si nos llevan a una situación límite. Si inhabilitan a Carme Forcadell es un escenario límite, como puede haber otros. Imaginémonos que empiezan a condenar al president Mas y a todas las conselleres y personas involucradas en la organización del 9-N, también son escenarios límites. Estas condenas nosotros no las podemos asumir. Se tendrán que ir tomando decisiones durante estas situaciones si es que van existiendo. Estas decisiones políticas pueden comportar en algún momento la valoración de si se tiene que acabar avanzando el calendario final o no. Se está valorando todo, se están estudiando todos los posibles escenarios. Es de responsabilidad propia estudiar los factores que intuimos, que pueden suceder.

Y, si hay una victoria del sí, elecciones constituyentes...
Después del referéndum hay unos meses para consolidar el resultado y en el plazo máximo de seis meses tendríamos que ir a unas elecciones constituyentes, para que se vuelva a conformar el nuevo Parlament que pueda elaborar la Constitución. Este es el calendario que tenemos marcado.

La cumbre del referéndum es un mensaje de que la sociedad catalana está muy mayoritariamente a favor

¿Han explicado esta hoja de ruta en Madrid?
Se está haciendo trabajo. La celebración de la cumbre por el referéndum, justo antes de Navidad, es una noticia en este sentido, el mensaje de decir muy mayoritariamente que la sociedad catalana está a favor de un referéndum. La cumbre tiene que servir para ir encontrando apoyos en el hecho de querer celebrar un referéndum como única y posible salida a la situación que vive nuestro país.

ERC ha pasado de ser una formación que salió muy dolorida del tripartit, a ser un partido que todas las encuestas sitúan al frente en unos comicios al Parlament. Cómo se ha conseguido eso?
Teniendo las prioridades muy claras. Y la prioridad de ERC ahora mismo se llama referéndum, y garantizar que con el referéndum gane el 'sí' a la independencia. Es tan así, que cuando este año ERC ha presentado sus presupuestos, después de muchos años de mucha austeridad para conseguir una deuda cero con las entidades financieras y por lo tanto ser una organización solvente y que se autofinancia, hemos conseguido generar una partida de un millón de euros que queremos dedicar a la campaña del 'sí' del referéndum. Ahora mismo éstas son nuestras prioridades políticas y refleja cualquier decisión que ERC toma.

¿El hecho de que el PDeCAT haya puesto ahora encima de la mesa el debate del candidato como lo valoran?
Diciendo lo mismo: para nosotros la prioridad política es el referéndum y que gane el 'sí'.

Puigdemont demuestra que la prioridad política de este Govern es el referéndum y por lo tanto no nos ocupa nada más

¿Le ha sorprendido que Puigdemont haya comunicado ya su decisión de no ser candidato?
No haré valoraciones. Entiendo que Puigdemont, cuando explica su situación, lo hace en concordancia con lo que yo digo. La prioridad política de este Govern, de este grupo parlamentario, es el referéndum y, por lo tanto, no nos ocupa nada más. Estamos trabajando a toda marcha para garantizar el referéndum, con todas las condiciones democráticas, que sea efectivo, que tenga un resultado vinculante, que sea decisivo y que gane el 'sí'. Por lo tanto, también estamos ocupados empezando a pensar cómo puede ser esta campaña del 'sí' a la independencia.

Desde el PDeCAT no se esconde que les gustaría que se volviera a reeditar JxSí. Cuál será la respuesta de ERC cuando se plantee? 
Ahora mismo, nuestra prioridad se llama referéndum. No entraremos a abrir otras agendas políticas.