Junts pel Sí y la CUP han dado un paso más para poder aprobar las leyes de desconexión. Este jueves han acordado que se puedan aprobar proposiciones de ley por lectura única a instancias de un solo grupo.

Asimismo, han establecido que el periodo de sesiones empezará el 15 de agosto, 15 días antes de lo que se hace actualmente, y que las comisiones de investigación tendrán que dotarse de un plan de trabajo antes de ser constituidas. Estos acuerdos se han dado en el marco de la ponencia de reforma del reglamento.

La tramitación de la reforma del reglamento

Después de que la propuesta de reforma del reglamento superara el debate a la totalidad, con los votos de Junts pel Sí y la CUP y el enfado de la oposición, esta empezó su tramitación.

Así, se constituyó una comisión para debatir sobre la propuesta y se abrió un periodo a fin de que los grupos pudieran presentar enmiendas, tanto al reglamento vigente como a la propuesta que hacían Junts pel Sí y la CUP.

Estas enmiendas, presentadas por todos los grupos parlamentarios menos el PP, son las que se han debatido este jueves en la ponencia de reforma del reglamento, un órgano que depende de la comisión. De esta reunión ha salido un informe que recoge las enmiendas votadas por mayoría. Por lo tanto, aunque este informe no es definitivo -se tiene que votar posteriormente en comisión y aprobar en el pleno- sí evidencia el consenso de los grupos respecto de las propuestas para reformar el reglamento.

La propuesta de lectura única

Una de las propuestas del informe, y por lo tanto susceptible de ser aprobada definitivamente, es la que permite a un único grupo tramitar un proyecto de ley por lectura única y, por lo tanto, agilizar mucho más la aprobación de este, ya que no se inicia el periodo de enmiendas ni el debate en comisión.

Aunque no lo han dicho explícitamente, esta sería la vía que utilizarían los partidos independentistas para aprobar la ley de transitoriedad jurídica, popularmente conocida como la "ley de desconexión".

Otra de las enmiendas acordadas es la de avanzar el periodo de sesiones en dos semanas. Así, el primer periodo ordinario de sesiones empezaría el 15 de agosto, en vez del 1 de septiembre, y acabaría el 31 de diciembre.

Enmiendas de la oposición

Asimismo, se ha conseguido el acuerdo sobre una enmienda presentada por Catalunya Sí Que es Pot que establece que, cuando se acuerde crear una comisión de investigación, "se tendrá que delimitar su objetivo y alcance así como los contenidos básicos del plan de trabajo".

Esta enmienda pretende evitar que una comisión de investigación quede en vía muerta antes de empezar a trabajar, como pasó con la comisión que pretendía investigar las declaraciones que había hecho el exsenador de ERC Santi Vidal, en las que aseguraba que el Govern estaba recogiendo los datos fiscales de los catalanes de manera ilegal.

No ha habido consenso, al menos no se refleja en el informe, sobre una enmienda presentada por la CUP que establece que "la condición de investigado en un procedimiento penal por parte de un órgano judicial por un delito de corrupción política provocará inmediatamente la suspensión de la condición de diputado por un periodo de tres meses".

En caso de aprobarse, esta enmienda afectaría directamente al diputado de Junts pel Sí Germà Gordó, investigado por la supuesta financiación irregular de Convergència.

En todo caso, Junts pel Sí y la CUP están negociando uno nuevo redactado de esta propuesta a fin de que se debata el martes próximo en la comisión.

El calendario

El próximo martes 6 de junio se celebrará la última sesión de la comisión de reforma del reglamento y servirá para elaborar un dictamen, a través del informe y la votación de las enmiendas, que teóricamente irá al pleno del 14 de junio. Este calendario se podría ver entorpecido si los grupos de la oposición pidieran un dictamen al Consell de Garanties Estatutàries, que podría alargar el procedimiento hasta un mes.

El PSC no descarta esta posibilidad ya que considera "muy grave" que Junts pel Sí y la CUP hayan reformado el reglamento "prescindiendo de la voluntad de la mayoría de grupos parlamentarios". Catalunya Sí Que es Pot también se plantea recurrir a esta vía ya que considera que si la reforma del reglamento se aprueba "Catalunya tendrá el reglamento con menos derechos democráticos de Europa".