El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, no esconden su voluntad de construir una alternativa que pueda rivalizar con el resto de fuerzas políticas, en caso de repetición de las elecciones generales. Si ayer Iglesias lanzaba el miedo a un sorpasso al PSOE, hoy Garzón ha insistido en la posibilidad de que la hipotética marca pueda "animar" a unos ciudadanos "descontentos con el fracaso político" en la investidura. El peligro de desmovilización de votos a través de la abstención está presente y el fenómeno podría hacer variar los resultados, en "esta suerte de segunda vuelta electoral" que serían unos comicios el 26J.
El entendimiento entre las dos formaciones parece cada vez más real. "El escenario es diferente que antes del 20 de diciembre", en palabras del candidato de IU, porque esta vez los podemitas también se plantean "seriamente" una negociación. Formalmente ésta no ha comenzado, a pesar de que los respectivos secretarios políticos hace días están en contacto. "Se llamarán y emplazarán a encontrarse, cuando sepamos que hay convocatoria electoral", ha dicho el madrileño. Esta noticia se dará a conocer el martes por la noche, o durante el día del miércoles, una vez que la Casa Real o el presidente del Congreso emita el comunicado donde se sabrá si el monarca propone un candidato, o no.
Mientras tanto, ambos dirigentes han sido vistos tomando cafés en el Congreso, en tono amistoso. Garzón insiste en que la alianza debería ser "puntual para un momento histórico", pero se mantiene firme en el reconocimiento de su agrupación. "Es un escenario de confluencia e iguales, y cada uno debe preservar su identidad", ha expresado. La negociación está en el aire, pero ya han emergido una serie de líneas maestras que podrían estar sobre la mesa. El líder de IU-UP considera que es "natural y concebido así, que los candidatos de cada formación vayan por la lista de Madrid".
En cuanto a los actos y mítines, Garzón prevé la posibilidad de hacer actos conjuntos, y también individuales. Sobre el programa tampoco hay nada establecido, aunque el político considera que comparten muchos puntos. "Si hay espacio de diferencias, éstas no desaparecerán", ha reiterado. Precisamente, el posible acuerdo debería ser sometido a las bases de su partido, como ya había anunciado el dirigente esta mañana, y también a la militancia de Podemos, como indicó Iglesias. Ahora bien, el republicano no se ha querido mojar sobre si en el seno de la formación hay quienes podrían no desear dicha unión.
Ronda del Rey
El candidato ha hecho estas declaraciones en la rueda de prensa posterior a la audiencia con el rey Felipe VI. Garzón ha manifestado el interés del monarca por saber si habría tal confluencia, al tiempo que el de IU le ha dirigido su opinión pesimista sobre la situación que vive España. "Estamos ante la posibilidad de un fracaso político. En la puerta de unas elecciones anticipadas", ha indicado. "Uno de los riesgos es la frustración de la gente", motivo por el que se buscaría hacer una campaña "más amena" o quizás "más corta". Garzón no es partidario de reducir el gasto, o la duración. "La gente se merece una convocatoria electoral con todas las garantías", ha afirmado desde el parlamento español.