El BYD Dolphin Surf ha irrumpido con fuerza en el mercado español, consolidándose en apenas un mes como uno de los eléctricos urbanos más atractivos del momento. Esta versión adaptada del Seagull chino marca el desembarco más ambicioso de la marca en el segmento de acceso a la movilidad eléctrica en Europa. Su llegada coincide con un hito global: más de un millón de unidades vendidas en todo el mundo desde su lanzamiento internacional, lo que lo sitúa entre los modelos eléctricos más populares del planeta.

La estrategia de BYD con este modelo se basa en ofrecer un coche funcional, económico y adaptado a las necesidades reales del entorno urbano. Con un precio que parte desde los 19.780 euros y que puede bajar hasta los 11.780 euros aplicando el Plan MOVES III con achatarramiento, el Dolphin Surf se convierte en uno de los eléctricos más asequibles disponibles en España. Esta cifra, unida a su equipamiento de serie y a su eficiencia, explica el impacto inmediato que ha tenido desde su llegada.

 

El modelo está disponible con dos opciones mecánicas: una versión de acceso con motor de 88 CV y batería de 30 kWh (220 km de autonomía WLTP), y una variante más capaz con 156 CV y batería de 43,2 kWh (hasta 322 km WLTP). Ambas utilizan tecnología LFP, con posibilidad de carga rápida en corriente continua de hasta 85 kW, permitiendo pasar del 30 al 80 % en menos de media hora.

Un urbanita con enfoque global y vocación masiva

Llama especialmente la atención que, a pesar de su orientación económica, el Dolphin Surf no renuncia a un equipamiento completo desde el acabado más básico. Incorpora de serie una pantalla táctil de 10,1 pulgadas giratoria, control de crucero adaptativo, frenada de emergencia, sensores de aparcamiento, cámara trasera y conectividad sin cables. Las versiones más altas añaden cámara 360°, asientos calefactados, sistema V2L y detalles estéticos más elaborados.

Su diseño ha sido adaptado al gusto europeo con una carrocería ligeramente más larga que la del modelo original —21 cm adicionales— para mejorar el espacio interior. Con una longitud cercana a los 4 metros, se posiciona como una opción ideal para ciudad sin sacrificar habitabilidad. Además, su bajo peso y su centro de gravedad contenido favorecen una conducción ágil y eficiente.

 

Lo destacable en este caso es que su éxito no se limita al mercado local. El millón de unidades vendidas a nivel global en apenas 25 meses confirma el alcance internacional de este modelo, que ha logrado democratizar la movilidad eléctrica sin necesidad de recurrir a formatos minimalistas o recortes funcionales. BYD ha sabido trasladar a Europa una fórmula que ya ha funcionado en Asia, manteniendo una relación calidad-precio que altera significativamente la competencia en el segmento.

El Dolphin Surf representa así una nueva etapa en la expansión de los eléctricos de acceso. Su planteamiento directo, su propuesta racional y su elevada demanda global lo sitúan como uno de los coches clave en el proceso de electrificación urbana en Europa.