Israel hace días que amenaza con atacar Gaza y con el hecho que la población del norte se desplace hacia el sur. De momento, sin embargo, Israel bombardea, pero no ha hecho la intrusión que se esperaba. Se espera que tarde o temprano, Israel entre en Gaza. El objetivo se ha dicho diversas que es destruir Hamás. Pero los israelíes tienen presente también otra cuestión. Y es exactamente qué impacto tendrá en términos políticos y de seguridad, especialmente los rehenes del grupo islamista.

🔴 Guerra entre Israel y Hamás, DIRECTO | Última hora del conflicto, ataques y la ayuda humanitaria a Gaza
 

En este sentido, desde que el día 7 pasado Hamás entró en territorio israelí y perpetró una acción terrorista sin precedentes que supuso la muerte de 1.400 personas y el secuestro de dos centenares más. En aquel momento, nadie dudaba de que Israel respondería con una acción militar de gran alcance en tres fases, la primera de las cuales –los bombardeos aéreos a gran escala sobre Gaza– está plenamente en marcha. Paralelamente, y de acuerdo con fuentes palestinas, unas 5.700 personas han muerto y 15.000 más han resultado heridas por los bombardeos israelíes sobre Gaza.

La segunda fase de esta amplia acción militar consistiría en operaciones terrestres de relativamente poca envergadura en el otro lado de la Franja con la finalidad de destruir objetivos concretos de Hamás, señalizar objetivos potencialmente interesantes y, tanto como sea posible, capturar o eliminar elementos hostiles del grupo islamista.

Destruir Hamás

El gobierno de Israel ha destacado que su intención es destruir Hamás. Desde hace días, el ejército ha avisado que los ciudadanos del norte se desplacen hacia el sur, para evitar las consecuencias de los bombardeos y que, según la prensa local, y que según la prensa, podría haber supuesto diferencias entre el ejército y el gobierno. En este sentido, el ejército ha destacado estar preparado para empezar la tercera fase de la guerra, es decir, esta operación para desmantelar Hamás. Según parece, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no se atrevería todavía a dar luz verde y todavía analiza las consecuencias que podría tener por los rehenes que continúan al poder de la organización islamista.

El bloqueo de Israel a Hamás

El bloqueo de Israel ha vaciado la economía de Gaza y ha dejado al 80% de sus habitantes dependientes de la ayuda internacional incluso antes de que estallara la crisis actual, ha dicho la ONU.

En un informe que describe las condiciones en el territorio palestino el año pasado, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad) dijo que dos tercios de la población de Gaza vivía en la pobreza, mientras que su tasa de desempleo del 45% era una de las más altas del mundo.

La Unctad ha dicho que un bloqueo de "décadas" había cobrado un precio alto a la economía de Gaza y que los flujos de ayuda que habían ayudado a apuntalar los niveles de vida de una población de poco más de 2 millones de personas se habían agotado.

El informe ha sido preparado por el organismo con sede en Ginebra antes de que militantes de Hamás atacaran comunidades del sur de Israel el 7 de octubre, matando a 1.400 personas y cogiendo 222 rehenes en Gaza. El posterior bombardeo israelí del territorio estropeó la infraestructura y provocó nuevos trastornos económicos, mientras que la autoridad sanitaria local dirigida por Hamás afirma que más de 5.000 palestinos han muerto.