El ministro de Patrimonio de Israel, el ultraderechista Amichai Eliyahu, ha asegurado que el lanzamiento de una bomba atómica contra la Franja de Gaza podría ser una de las opciones en la guerra que enfrenta a Israel con Hamás, según ha informado este domingo el diario The Times of Israel. Según relata el medio, el ministro del partido Poder Judío, preguntado en un programa de radio sobre la posibilidad de lanzar una bomba atómica en el enclave palestino, ha afirmado que "es una de las posibilidades". Inmediatamente, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha salido a desmentir sus palabras. "Las palabras de Amichai Eliyahu están alejadas de la realidad", ha dicho Netanyahu, que ha insistido en que el Ejército está actuando "de acuerdo con los más altos estándares del derecho internacional para evitar daños a personas no involucradas" y ha añadido que seguirá haciéndolo hasta "conseguir la victoria".

Además, Netanyahu, ha anunciado que ha suspendido a Eliyahu de "manera indefinida" de las próximas reuniones dentro del gobierno, aunque, de momento, sigue en el puesto.

Según varias fuentes, el Estado judío desarrolló armamento nuclear de forma encubierta hace más de 50 años. Hasta ahora, no admite ni niega su posesión, pero es el único país del mundo que no lo reconoce abiertamente; pero es un secreto a voces que es un Estado nuclear y figura como tal en los listados de instituciones de investigación atómica.

Eliminación de Hamás

Por su parte, el ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, ha asegurado este domingo en X que ha hablado con Eliyahu, y quien le ha asegurado que "sus palabras han sido dichas como una metáfora". "Claro está para todos nosotros que la organización Hamás tiene que ser destruida y borrada, y claro está que haremos todo el posible para retornar a las personas secuestradas en sus hogares", ha afirmado.

El ministro ultra, en la misma entrevista a una radio ultraortodoxa, también se ha mostrado partidario de la anexión del territorio de Gaza para construir asentamientos y de negar la ayuda humanitaria a la población en el enclave palestino. "No existen civiles que no estén involucrados", ha aseverado. Hace solo tres días, Eliyahu ya encendió la polémica después de una publicación en su cuenta de Facebook, en el cual calificaba de "deleite para los ojos" los bombardeos israelíes sobre Gaza y las operaciones militares en Cisjordania.

Las reacciones a las palabras de Eliyahu no se han hecho esperar y el líder de la oposición israelí, Yair Lapid ha exigido su dimisión, afirmando que con sus palabras "ha perjudicado a las familias de los secuestrados", así como a la sociedad civil y al "estatus internacional" de Israel.