Es el momentazo de esta campaña electoral y tiene muy poco premio en las portadas de este martes. Es el resbalón de Alberto Núñez Feijóo en TVE desafiando a la periodista Silvia Intxaurrondo tras desmentir ella la afirmación del candidato de que el PP, al contrario que el PSOE, ha subido siempre las pensiones por encima del IPC. "No es correcto, señor Feijóo", corta la periodista, firme. Es el equivalente al mítico momento en que Carlos Alsina descoloca a Mariano Rajoy, que decía que los catalanes perderían la nacionalidad española con la independencia y el periodista le explica que lo prohíbe la Constitución ("¿Y la europea"?, recuérdalo). Rajoy se salió por la tangente diciendo que todo aquello eran disquisiciones. Feijóo, en cambio, no se encoge. Feijóo insiste en que sus datos "son absolutamente correctos" y pregunta a la periodista, nervioso y agresivo, de dónde saca sus datos, le recomienda que revise la hemeroteca y lo avisa de que le debe una recitificación. Ella no se deja intimidar y remacha: "No lo hicieron ni en 2012, ni en 2013, ni el año 2017". El único diario que abre portada con los líos de Feijóo es El País, El Periódico y el Ara, que publican unos recortes en primera página. El resto, nada.
Las portadas mantienen la misma actitud que la semana pasada. Los diarios de Barcelona confinan la campaña electoral en algún rincón pequeño —salvo El Periódico— incluida La Vanguardia, aunque, este lunes, Feijóo hacía campaña en Barcelona. Cualquier otro tema les motiva más: la invasión rusa de Ucrania, la política lingüística de la Generalitat o el enésimo enredo de la justicia.
Los de Madrid, en cambio, gas a fondo con el tráfico de las elecciones. Vale la pena detenerse un momento en la portada de El Mundo, que consigue reunir en una sola página todas sus manías políticas de estos últimos años. En el título principal vuelve a destacar que Pedro Sánchez gobierna "atado" a ERC y Bildu, es decir, con separatistas y terroristas. En la fotografía principal destaca el saludo "amistoso y afectuoso" del presidente del Gobierno a la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez (la del enredo con José Luis Ábalos cuando era vicepresidente y mano derecha de Sánchez): la conexión bolivariana y bolchevique. En la columna junto al título principal vuelve a pone el dedo en la llaga del voto por correo al decir que Correos no consigue localizar a 450.000 solicitantes —en realidad sí que los ha localizado, pero no estaban en su casa cuando los carteros les han llevado la notificación del voto. Así recuerdan a sus lectores qué significa el actual gobierno en tres golpes de portada. Un mitin de papel.
