Un viaje con la R3 Barcelona - Vic ha sido suficiente para evidenciar el déficit de la línea. El presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Joan Canadell, ha denunciado hoy al Síndic de Greuges la "dejadez del Estado español con Rodalies y en especial la R3, dirección Ripoll. "No puede ser que en el siglo XXI este trayecto sólo cuente con una vía, eso provoca que al final sólo la utilicen unas 27.000 personas, cuando en realidad si funcionara bien probablemente serían el doble o el triple", denuncia Canadell.

La reivindicación de la Cámara se ha hecho a través de un viaje con la R3 desde la estación de Plaça Catalunya hasta Vic; un trayecto que han empezado Canadell y el síndic, Rafael Ribó, junto con la prensa, y al cual se han unido varios alcaldes de los puntos por los que pasa la vía. Entre las principales reivindicaciones, la Cambra se queja de la vía única y la necesidad del desdoblamiento y la falta de inversión en Rodalies.

Según ha denunciado Canadell al inicio del trayecto, "el incumplimiento" del Estado ya se ha dado en tres ocasiones. En primer lugar, el Plan de Infraestructuras Ferroviarias de Cercanías de Barcelona 2008-2015 prometió una inversión de 4.000 millones de euros, 700 millones de los cuales tenían que estar destinados a la R3, una inversión que no se ha ejecutado.

Además, los presupuestos del Estado de 2014-2016 contemplaban también una inversión de 306 millones de euros en Rodalies, "de la cual sólo se ha ejecutado el 12% a día de hoy", según explica Canadell. La Cambra ha reclamado también "poner en marcha el desdoblamiento des de Parets hasta La Garriga", comprendido en un estudio del 2015, pero que no se ha hecho.

Ribó ha aseverado que "se tendría que poder ir de Barcelona a Vic en media hora, eso sería lo normal", y ha explicado que desde el Síndic "recibimos a menudo quejas sobre esta línea y consideramos que la dejadez del Gobierno —porque esto depende de Adif— es intolerable y no se está apostando de verdad por estas infraestructuras, y más en un momento en que se tendría que mimar todo lo que es transporte".

Además, es una de las líneas que acumula más retraso, con un 88,6% de cumplimiento, y desde la Cambra aseguran que es un agravio para la comarca de Osona y las poblaciones de la Catalunya Central a nivel económico, porque "les resta potencial".