El Mundial de MotoGP 2025 tiene un nombre propio: Marc Márquez. El piloto de Cervera, ahora al mando de la poderosa Ducati GP25 del equipo Lenovo, ha recuperado la mejor versión de sí mismo. Está demostrando un dominio arrollador. Tras años complicados con Honda y una temporada de transición con una Ducati inferior en Gresini, Márquez ha vuelto a la cima. Y está dispuesto a hacer historia, algo que tiene aterrorizado a Valentino Rossi.
Con ocho títulos mundiales en su palmarés, el gran objetivo de Marc es ahora alcanzar el noveno campeonato, algo que le permitiría igualar a Rossi, su antiguo ídolo y ahora su gran rival histórico. Y este hecho ha encendido todas las alarmas en el entorno del 46. La posibilidad de que Márquez se sitúe a su misma altura en número de títulos inquieta a Rossi.
Marc Márquez va a por Valentino Rossi
La relación entre ambos comenzó con admiración mutua. Pero se deterioró drásticamente tras el conflictivo incidente en 2015 en Argentina. En aquella ocasión Rossi derribó a Márquez en lo que se mantiene como una de las imágenes históricas de la competición. Desde entonces, la rivalidad entre los dos ha marcado una época en el motociclismo. Para muchos, ese momento selló un antes y un después en la relación de dos de los grandes mitos del deporte.
Ahora, Marc lo tiene claro: “El nueve es el siguiente. Con él igualaría a Valentino Rossi en campeonatos, y lo vamos a intentar”. Y lo cierto es que lo tiene a tocar. En la clasificación actual, Márquez lidera con autoridad, con una ventaja de 32 puntos sobre su hermano Álex y 93 sobre Pecco Bagnaia, el campeón vigente. Su estado físico y mental está en el punto más alto desde hace años. Y su nivel de pilotaje es cada vez más inteligente y maduro.
Valentino Rossi ya tiembla
Tras más de una década en la categoría reina, Márquez ha dejado de ser el joven impulsivo para convertirse en un estratega del asfalto. Las múltiples lesiones que ha sufrido en los últimos años le han enseñado a gestionar los riesgos y a conocer sus límites, lo que le ha convertido en un piloto aún más completo.
Mientras tanto, Rossi observa desde la distancia cómo el que un día fue su admirador se acerca peligrosamente a su leyenda. El temor de Valentino no es solo por los títulos, sino porque Márquez se está convirtiendo en lo que él fue: un referente indiscutible para las nuevas generaciones. Hoy, los jóvenes pilotos de MotoGP ven en Marc lo que él vio un día en Rossi. Ahora el catalán se dispone a destronarlo.