Ha estado muy cerca, pero no ha podido ser. La Unió Esportiva Sant Andreu se ha quedado a las puertas del milagro. Concretamente, a solo un penalti. Eso es lo que ha separado al combinado catalán de eliminar al Celta de Vigo de la Copa del Rey. El partido de los andreuenses ha sido admirable, poniendo contra las cuerdas a un equipo que compite en competiciones europeas y que ni con Iago Aspas y Borja Iglesias sobre el campo han podido batir la resistencia quadribarrada. Sin embargo, después de un 1-1 en los 120 minutos, los 11 metros han negado la victoria a los locales. Pero sea como sea, el Narcís Sala tardará en olvidar esta noche, mágica y cruel por igual.

Orgullo y resistencia andreuenca

Hoy se respiraba un ambiente especial en la villa de Sant Andreu. Desde bien temprano, los alrededores del Narcís Sala se han llenado de andreuenses que desde hace días solo sueñan con una cosa: vivir una noche inolvidable de Copa. El año pasado, contra el Betis, ya demostraron que podían competir contra un equipo de Primera División. Este año, el reto era un Celta de Vigo que ha presentado un once bastante titular, con una cara conocida en el feudo andreuense: Ferran Jutglà.

Ferran Jutglà, durante el Sant Andreu - Celta de Copa / Foto: EFE
Ferran Jutglà, defendiendo una jugada en la primera parte / Foto: EFE

El delantero catalán volvía a la que fue su casa durante su etapa de juvenil y un año en el primer equipo liderando el ataque celeste. El Narcís Sala lo ha recibido con honores, pero en el césped no había amistad que valga. El exfutbolista quadribarrado ha vivido una batalla titánica con los dos centrales desde el primer minuto. Cada vez que Jutglà tocaba la pelota, había sentimientos encontrados en las gradas: orgullo, nerviosismo y temor. Y es que ha estado muy cerca de perforar la portería del gol sur que conoce tan bien en dos ocasiones. Sin embargo, dos grandes intervenciones de Raul Garcia han impedido que el marcador se moviera durante los primeros 45 minutos.

Ni Aspas ni Borja Iglesias son suficientes para evitar la prórroga

En la represa, Jutglà ha doblado la apuesta con un disparo enroscado desde la frontal del área que ha impactado en la madera derecha de la portería del Sant Andreu, poniendo el miedo en el cuerpo a todo el Narcís Sala. Ahora bien, el conjunto catalán no se dejaba intimidar. Espoleados por más de 5.000 almas que no han dejado de animar, cada llegada, por tímida que fuera, era celebrada casi como un gol. La locura ha llegado en el minuto 26, cuando reclamaban un penalti dudoso en una internada por banda derecha. Sin embargo, el árbitro no ha cedido.

Iago Aspas se lamenta en el campo del Sant Andreu / Foto: EFE
Iago Aspas, la máxima estrella del Celta, protestando al árbitro / Foto: EFE

El partido continuaba atascado y Claudio Giráldez, que no lo veía nada claro, se ha sacado dos ases de la manga: Borja Iglesias y Iago Aspas han entrado para intentar esquivar una prórroga que parecía cantada.  Con los dos en el campo, el encuentro se ha convertido en un auténtico monólogo del Celta. Aspas ha rozado el gol en una jugada espléndida sellada con un cabezazo colocado, pero la suerte ha estado de nuevo del bando local y la eliminatoria necesitaría 30 minutos más, como mínimo, para resolverse.

Alexis García hace enloquecer al Narcís Sala e Iglesias lo silencia

El Narcís Sala ha celebrado como una victoria el final del partido. La ilusión iba creciendo y el sueño continuaba vivo, aunque el desgaste del equipo cuatribarrado era evidente. A los puntos, el Celta había sido claramente superior, pero esta es la magia del fútbol y de la Copa. Porque cuando parecía que el Sant Andreu se quedaba sin fuerzas, Alexis García ha desatado la locura andreuenca con un disparo con el exterior que se ha colado en el fondo de la red gallega.

Pero la alegría local ha durado muy poco. Justo en la jugada siguiente, Borja Iglesias ha recogido un balón dentro del área y, con una definición de crack, ha igualado el partido. Este jarro de agua fría, sin embargo, no ha frenado la ambición de una UESA que ha acabado la prórroga con uno más, debido a la expulsión de Carlos Domínguez por doble amarilla. Con uno más, los catalanes han dejado de sufrir, a pesar de que no han podido evitar los penales.

Cruel final para el sueño del Sant Andreu

En la tanda de penaltis, con un Narcís Sala convertido en una olla a presión, la igualdad ha continuado hasta el sexto penalti del Sant Andreu. Con el Celta habiendo convertido todos sus lanzamientos, Sergi Serrano ha enviado a las nubes un balón que ha acabado con el sueño andreuense. Tan cerca y a la vez tan lejos.

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