Pep Guardiola es conocido por su fuerte carácter, que le ha ocasionado problemas en todos los clubes por los cuales ha pasado. Comenzando por el Barça, donde se marchó después de cuatro años, y con el tiempo se filtró que la relación con la mayoría de los capitanes se había enfriado mucho durante los últimos meses. Leo Messi, Gerard Piqué o Dani Alves fueron los principales afectados, si bien acabaron solucionando las diferencias personales que tenían.
Una cosa muy similar ocurrió en el Bayern de Múnich. El entrenador de Santpedor acabó distanciado de los principales líderes del vestuario, entre ellos Robert Lewandowski, Arjen Robben, Franck Ribéry o Manuel Neuer, y también tuvo diversos enfrentamientos con Bastian Schweinsteiger, lo que provocó que se comprometiera con el Manchester United en 2015. Y esto se ha vuelto a repetir en el Manchester City, al cual dirige desde hace siete años.
Nada más llegar, el mánager de 52 años de edad hizo una limpieza a fondo, y no tuvo piedad con leyendas como Joe Hart o Yaya Touré, uno de sus principales enemigos, como Zlatan Ibrahimovic. Y más recientemente, tuvo una fuerte pelea con Joao Cancelo, que pasó de ser titular indiscutible en la institución inglesa, a tener que marcharse a préstamo, primero para probar suerte en el Allianz Arena, y ahora, en el Camp Nou.
Y el internacional luso no es el último crack de la plantilla ‘skyblue’ que no puede ni ver a Guardiola. Porque le ha ocurrido lo mismo a Kalvin Phillips, que se ha revelado que tiene una relación nula con Pep, una cosa que explica los pocos minutos que tuvo a lo largo de la pasada campaña, siendo totalmente residual, a pesar de que tuvieron que pagar prácticamente 50 millones de euros al Leeds United para llevarse a su capitán en 2022.
Este curso ha tenido un poco más de continuidad, gracias a la sanción de Rodrigo Hernández, pero aún y así solamente ha podido acumular 167 minutos divididos en cinco choques, uno de ellos como titular.
Phillips pide que le dejen salir del Etihad Stadium en enero
Phillips está viviendo un infierno, y no aguanta ni un solo día más en el Etihad Stadium. Por ello pide a la directiva, liderada por Txiki Begiristain y Ferran Soriano, que le permitan irse en enero sin problemas, para poder perder de vista por completo a Guardiola.
Un deseo que el City le concederá.