Hansi Flick ya ha dejado clara su postura ante una de las grandes incógnitas del mercado de verano del FC Barcelona: la convivencia en el once de Raphinha y Nico Williams. El técnico alemán, recién llegado al banquillo culé, tiene una idea clara de cómo quiere que juegue su equipo, y en esa visión no sobra nadie. Al contrario: el plan de Flick pasa por alinear juntos a Nico, Raphinha y Lamine Yamal en un ataque de vértigo.
La dirección deportiva ha recibido en las últimas semanas varias llamadas por Raphinha, especialmente desde la Premier League, donde el extremo brasileño mantiene un gran cartel. Sin embargo, Flick ha sido tajante: no quiere oír hablar de una salida. El entrenador del Barça considera al ex del Leeds una pieza indispensable, no solo por su desequilibrio en ataque, sino por su compromiso táctico y capacidad de trabajo en defensa.

Nico y Raphinha, compatibles en el sistema de Flick
Con la llegada de Nico Williams cada vez más cercana, muchos intuían que el Barça se vería obligado a hacer hueco con una salida en ataque, y el nombre de Raphinha era uno de los que más sonaba. No obstante, Flick ha sorprendido al cuerpo técnico y a la dirección deportiva con una propuesta ofensiva que incluye a ambos extremos como titulares, junto a Lamine Yamal o incluso como alternativa a él en función del rival.
Flick cree que con Nico por la izquierda, Raphinha por dentro y Lamine por la derecha, el Barça ganará una capacidad de desborde, velocidad y agresividad en ataque que le ha faltado en los últimos años. Además, valora la posibilidad de rotar entre ellos para evitar sobrecargas y mantener siempre un tridente fresco.

Raphinha no está en venta
Ante las ofertas recibidas, la respuesta del club ha sido clara y directa, en sintonía con Flick: Raphinha no está en venta. La temporada pasada ya cerró muchas bocas con un rendimiento más que notable, y Flick confía en que, bajo su mando, el brasileño alcance su mejor versión.
La apuesta es arriesgada, ya que mantener a tres extremos de primer nivel puede generar cierta competencia interna. Pero Flick lo tiene claro: quiere calidad, compromiso y ambición. Y tanto Nico como Raphinha representan esos valores a la perfección.
En un momento donde muchos entrenadores piden salidas antes de fichajes, Flick hace lo contrario: quiere sumar sin restar, y está dispuesto a gestionar un vestuario con talento de sobra para competir por todo. Su Barça será ofensivo, eléctrico y, sobre todo, con Raphinha y Nico en el campo.