Llega la última jornada de la Liga 1|2|3 y la cuarta posición de descenso a Segunda División B sigue bacante. Hasta seis equipos han dejado los deberes para el último día y llegan a la trascendental cita de este sábado (20.30 horas) con posibilidades de perder de categoría.

El Nàstic de Tarragona es el único equipo catalán que se juega sobrevivir, a pesar de su polémica victoria en Huesca. Cuando todo parecía que el equipo tarraconense podía respirar tranquilo, sus vecinos de Reus perdían en el Municipal y daban vida al Córdoba, obligando al equipo grana a ganar para certificar la permanencia. Una amarga ayuda desde Reus que aumentará las rivalidades entre los dos equipos. El Nàstic no ha conseguido crear una dinámica positiva a lo largo del año y los tres entrenadores cesados son la prueba de la mala gestión desde los despachos y el banquillo.

Una pesadilla a casa y letal a domicilio

A más de un aficionado o aficionada grana se le debe haber detenido la respiración viendo la camaleónica temporada del Nàstic. Delante de esta montaña rusa, el presidente del club Josep Maria Andreu tuvo que prescindir de hasta tres técnicos para intentar salvar la categoría, hecho que todavía no se ha asegurado.

Lluís Carreras, Antonio Rodríguez y Nano Rivas sucumbieron en el intento de enderezar el rumbo del equipo, que ha estado buena parte de la temporada flirteando con las posiciones de descenso. Con la llegada de José Antonio Gordillo al banquillo parece ser que, por fin, el Nàstic ha encontrado al técnico ideal para luchar hasta el final.

Lluís Carreras Nàstic de Tarragona

Lluís Carreras sólo duró cuatro jornadas en la banquillo / Nàstic de Tarragona

El equipo grana ha sido capaz de ganar en los estadios más complicados y, al mismo tiempo, perder en casa contra rivales que, a priori, eran inferiores. Equipos que se están jugando la posibilidad de subir a Primera División no consiguieron tumbar a un Nàstic letal a domicilio. El hecho de ceder la posesión y fiarlo todo al contragolpe ha sido la clave del equipo tarraconense para sumar tantos puntos en estadios parecían inexpugnables.

Valladolid 0-3 Nàstic de Tarragona
Numància 1-2 Nàstic de Tarragona
Rayo Vallecano 2-3 Nàstic de Tarragona
Osasuna 0-2 Nàstic de Tarragona
Granada 0-1 Nàstic de Tarragona


En cambio, cuando el Nàstic jugaba ante su afición se transformaba en un equipo sin ideas, lento en ataque y vulnerable en defensa. El Nou Estadi sólo ha celebrado seis victorias y ha sufrido once derrotas en veinte partidos. Un bagaje muy pobre para un equipo que empezaba la temporada con el objetivo de no sufrir por la permanencia.

El Reus, una piedra en el zapato

La gran rivalidad entre las ciudades de Reus y Tarragona se ha trasladado a los derbis desde el ascenso del conjunto rojinegro a la categoría de plata, ahora hace dos temporadas. El Nàstic ha sido incapaz de ganar a su eterno rival en las cuatro ocasiones en que se han visto las caras hasta el momento a la Segunda División.

Este año el equipo entonces entrenado por Lluís Carreras no pasó del empate en el Municipal de Reus, mientras que en el partido celebrado en el Nou Estadi, los reusenses consiguieron, una vez más, dejar en evidencia al Nàstic (1-2).

La sorprendente derrota del Reus en los últimos compases de partido ante el Córdoba fue una auténtica jarra de agua fría para el Nàstic, que creía haber salvado la categoría después de ganar contra todo pronóstico en Huesca.

Derbi Nàstic Reus Foto Gimnástico de Tarragona

Nàstic de Tarragona

Una jornada para finalizar la temporada y tres puntos en juego. El Rayo Vallecano, que acaba de conseguir el ascenso a Primera, es el último obstáculo para el Nàstic. El Nou Estadi de Tarragona cerrará la temporada para certificar la permanencia... o acompañar al Barça B en el pozo del descenso.