El nuevo contrato de Lamine Yamal con el Barça hasta 2031 entró en vigor el pasado domingo, cuando el de Rocafonda cumplió los 18 años, pero el acto de la firma y la foto oficial se ha producido este miércoles. Así lo ha querido el propio futbolista, ya que cuando se selló el acuerdo el pasado 27 de mayo, no estuvieron presentes su abuela Fátima y su hermano Keyne, dos personas que son importantísimas para Lamine y que no han faltado al acto oficial de hoy en el Spotify Camp Nou.

"El Barça es mi vida, es mi casa"

Tras posar con su nueva camiseta con el número 10 junto a sus padres y también con el presidente Joan Laporta, Lamine Yamal ha atendido a los canales oficiales del club, dónde se ha mostrado "muy feliz" por cumplir el que es su sueño desde niño: "Es un sueño desde pequeño. Tanto yo como mi familia estamos muy felices. El Barça es toda mi vida. Desde los 7 años, cuando llegue aquí, es mi casa. Para todos los niños de la Masia llegar al primer equipo es un sueño y yo lo estoy cumpliendo".

Por otro lado, Lamine ha admitido que el objetivo que se marca es seguir ganando: "Ganar, siempre ganar, disfrutar y seguir creciendo", mientras que ha tenido unas palabras hacia la afición: "Tengo muchas ganas de jugar ante la afición en el Camp Nou. Disfrutaremos mucho este año y ganaremos seguro".

"De Messi, Ronaldinho y Maradona me quedo con todo, pero intentaré hacer mi camino"

Posteriormente, Lamine Yamal se ha dirigido a la Botiga del Barça en el Spotify Camp Nou, dónde han estado presentes muchos aficionados y diferentes medios de comunicación. En primer lugar, el de Rocafonda ha vuelto a recalcar que "seguiré en el club de mi vida, el mejor club del mundo", y que sus próximas metas son "ganar la Champions y el Mundial".

Preguntado por lo que significa el 10 y más especialmente en el Barça, Lamine ha explicado que "de Messi, me quedaría con todo, de Ronaldinho con todo y de Maradona con todo. Espero seguir con su legado", aunque "intentaré hacer mi camino", mientras que ha dejado claro que "no siento presión".

Finalmente, Lamine ha comentado que "la crítica y el elogio, si no viene de mi familia, me son indiferentes" y ha explicado lo importante que son sus seres más cercanos para él, en especial su abuela Fátima: "Sin mi abuela no podía hacer un acto tan especial para mí. El acto se ha retrasado por ella, ya que estaba en Marruecos. Muy agradecido por todo lo que ha hecho por mí, no se lo podrá devolver nunca".