Un partido. 90 minutos. Un título. El más grande. La Champions League 2016/17 consume sus últimas horas de vida y el trofeo busca nuevo dueño. El Real Madrid se cita con la historia para convertir en leyenda la conquista de su duodécima Copa de Europa y ser el primer equipo que consigue reeditar el título desde el cambio de formato de la competición en 1992. Para ello tendrá que superar la perfección defensiva que plasma la Juventus de Turín, dominador del fútbol italiano que busca la gloria en el Millennium Stadium, el estadio Nacional de Cardiff (20:45 horas - TV3, Antena 3 y beIN Sports).

Convertido en el segundo clásico de Europa, tras el Real Madrid-Bayern de Múnich, en Gales llega la reedición de la final de 1998 que decidió Pedja Mijatovic en la conquista de la séptima en Amsterdam. Desde entonces, cuatro Copas de Europa más para llegar a once.

El Madrid disputará su tercera final de Champions en las últimas cuatro temporadas. Los dos derbis contra el Atlético abren la puerta a la Juventus. Un equipo que también tiene la opción de firmar un hito histórico con la consecución del triplete después de ganar la Liga i la Copa.

Los blancos, vigentes campeones y máximos goleadores de la presente edición (32 goles en 12 partidos), se verán las caras con el bloque defensivo más firme de la competición. La Juventus sólo ha encajado tres goles en su camino hacia Cardiff, dejando a cero su portería en la eliminatoria contra el Barça.

El premio de la ‘Juve’

La Juventus llega lanzada, con los títulos de Liga (el sexto consecutivo) i de Copa bajo el brazo. El reto de volver a levantar la 'orejona' 21 años después supone gasolina suficiente para un equipo que ha demostrado estar capacitado para todo. El técnico Massimiliano Allegri se ha ganado el respeto de la afición tras gestionar la herencia del ídolo local, Antonio Conte, y mejorar las prestaciones de una plantilla rejuvenecida y revitalizada.

Sus jugadores llegan en estado de euforia al Millennium Stadium, decididos a sumar la tercera Champions a las vitrinas del club. Es un momento trascendental para los turineses, en particular para el capitán Gianluigi Buffon, que busca coronar su carrera con su primera Copa de Europa, el único trofeo que le falta a nivel de clubes.

El propio Buffon disputará su tercera final europea (perdió dos en 2003 y 2015) y liderará, con 39 años, el 4-2-3-1 de Allegri. La principal duda del técnico tiene que ver con la posición que ocupará el exblaugrana Dani Alves, de la que dependerá también la titularidad del extremo colombiano Juan Guillermo Cuadrado.

A la espera de las últimas pruebas en el mismo escenario de la final, todo apunta a que Alves jugará avanzado para aumentar el equilibrio de un equipo que tendrá que defenderse de las subidas de los laterales madridistas. La pareja de internacionales italianos Leonardo Bonucci y Giorgio Chiellini ocuparán el centro de la defensa, con Andrea Barzagli y Álex Sandro en los dos laterales.

A pesar de que Barzagli es un central, Allegri le alineó con buenos resultados en el lateral derecho en las dos semifinales contra el Mónaco y también en la final de la Copa italiana ganada contra el Lazio. El exmadridista Sami Khedira formará el doble pivote en el centro del campo al lado de Miralem Pjanic, con Alves, la magia de Paulo Dybala y Mario Mandzukic en línea de tres por detrás del delantero Gonzalo Higuaín. "Será un partido especial para mí, he estado siete años en Madrid", afirmó un Higuaín que se reencontrará con viejos amigos.

Tras las finales perdidas en Manchester contra el Milan y en Berlín contra el Barça, la Juventus está lista para recuperar el trono del fútbol europeo y traer a Turín el trofeo de la Liga de Campeones, rompiendo así su mala racha. La leyenda de la famosa duodécima madridista ante la perfección defensiva.

Las dudas del Madrid

La final soñada por Gareth Bale, curiosamente, se podría jugar sin el mismo Gareth Bale. El delantero galés aseguró que está plenamente recuperado de su lesión muscular pero que no se ve preparado para jugar los 90 minutos de la final.

Zinedine Zidane, instalado en el éxito desde que se hizo cargo del primer equipo, tendrá que decidir si apuesta por Bale o Isco Alarcón, un futbolista fundamental pese a su poco protagonismo en el tramo inicial de la temporada. Las rotaciones masivas de Zidane y el descanso de Cristiano Ronaldo han provocado que el equipo llegue a punto al tramo final y sin notar el desgaste de un año que le ha llevado a competir hasta el último partido.

La apuesta por Isco aporta mayor equilibrio al Madrid. Y con el 4-4-2, mejora el juego pero pierde en profundidad. Una apuesta trascendental para entender como quiere atacar el técnico francés el sistema defensivo sin fisuras de los italianos. Además, Zidane tendrá que descartar hasta cinco futbolistas porque toda la plantilla ha viajado a Cardiff. Con el tercer portero Rubén Yáñez, Fabio Coentrao o Mariano descartados, entre Pepe, James, Danilo, Lucas Vázquez y Marco Asensio se reparten papeletas.

El equipo titular parece claro. Keylor Navas llega en su mejor momento de la temporada. Dani Carvajal se ha recuperado a tiempo y con Marcelo son dos armas claves ante el orden italiano en los laterales. Raphael Varane será la pareja de Sergio Ramos, que busca marcar en su tercera final de Champions consecutiva. Casemiro será el guardaespaldas de Toni Kroos y Luka Modric; Isco, con libertad para inventar en la media punta o Bale en la banda para enlazar con los delanteros: Karim Benzema y Cristiano Ronaldo.