Ni se puso de pie, ni cantó el himno de los Estados Unidos. El quarterback de los San Francisco 49ers, Colin Kaepernick, se negó a representar el himno de su país en un partido de pretemporada contra los Green Bay Packers por el trato que recibe a la gente de color en su país.

"No me levantaré para mostrar orgullo a una bandera de un país que oprime a la gente negra y a la gente de color. Para mí, eso es más importante que el fútbol y sería egoísta, por mi parte, mirar hacia otra lado", justificaba al jugador.

La actitud del quarterback ha llevado de la mano duras críticas, incluso, del candidato republicano Donald Trump, que tildó su comportamiento de "execrable". Pero eso no es todo. Decenas de personas han reclamado a través de las redes sociales que se lo expulse de la liga profesional de fútbol americano, el NFL, pero el club y otros jugadores de la liga han salido en su defensa amparándose en la libertad de expresión.

Esta, sin embargo, no ha estado la primera vez que se produce un episodio parecido en el deporte norteamericano. El año 1996, por ejemplo, el jugador de los Denver Nuggets de la NBA Mahmoud Abdul-Rauf fue sancionado por el mismo hecho.