El Barça debe hacer autocrítica y su entorno -incluidos los periodistas- también. Matthijs de Ligt es el hombre de moda en clave blaugrana, pero las últimas informaciones apuntan que el central holandés del Ajax no aceptará la oferta proveniente del Camp Nou. Por lo visto, el PSG y la Juventus están dispuestos a ofrecer un sueldo estratosférico a De Ligt, mientras que el Barça quiere situarlo en la misma escala salarial que su excompañero Frenkie de Jong. Las teóricas calabazas del capitán ajacied han hecho daño a la secretaría técnica blaugrana y también a una parte muy importante de la prensa, que ahora lo tilda de pesetero.

Un proyecto en duda

En primer lugar, no se puede asumir que De Ligt escogerá la oferta francesa o italiana exclusivamente por dinero. Es cierto que un equipo como el PSG se puede permitir el lujo de pagarle literalmente lo que quiera y es cierto que su agente, Mino Raiola, se ha especializado al llevar las negociaciones al límite; pero eso no debe esconder que hay más factores que influirán en su decisión. El Barça se debe preguntar qué proyecto deportivo está ofreciendo a un jugador que sólo tiene 19 años y que, como es lógico, quiere disfrutar de minutos de calidad. De Ligt es inteligente. En el Campo Nou jugadores jóvenes como Malcom, Carles Aleñá, o Riqui Puig -que por cierto, tiene la misma edad que el central- tienen un papel residual y otros como Samuel Umtiti se niegan a liberar su plaza. Todo eso, mientras Ernesto Valverde demuestra que hombres como Gerard Piqué son inamovibles.

¿Una cuestión de dinero?

Hace tiempo que el argumento del dinero ha dejado de tener sentido. Los ingresos del Barça, a diferencia de otros grandes clubes europeos, provienen de fuentes lícitas, pero este hecho no tiene que servir de excusa. La entidad ya ha demostrado que no tiene ningún inconveniente en introducirse dentro de la espiral inflacionista del mercado actual abonando cifras irreales por Ousmane Dembélé o Philippe Coutinho. Pagar 20 millones por temporada a De Ligt sería una locura, pero si realmente es el hombre escogido para liderar el eje de la defensa durante una década no debería haber ningún inconveniente para que cobrara, como mínimo, lo mismo que Umtiti.

Bartomeu quiere ganar crédito

Se está dando por hecho que De Ligt se ha escapado, pero todavía queda una vía abierta. La junta directiva actual está muy tocada después de una temporada decreciente del Barça y la figura de Josep Maria Bartomeu está en el centro de las miradas. El presidente ya ganó cierto crédito después de "salvar" el fichaje de Frenkie de Jong cuando parecía que el mediocampista apostaba por la oferta del PSG y ahora la estrategia se podría repetir. No es descartable, pues, que las cosas con De Ligt estén más frías de lo qué parece. Ahora que todo el mundo cree que De Ligt no llegará al Camp Nou, Bartomeu podría volver a ejercer de "héroe" inesperado de los culés.