La  debilidad de la confianza de los consumidores americanos, que ha retrocedido hasta 92,6 puntos en mayo frente a 94,7 en abril, ha mostrado un cierto escepticismo respecto al discurso positivo y optimista de la Reserva Federal sobre la evolución de la economía USA, siendo el empleo la cuestión que más preocupa al hombre de la calle. El viernes se publican los datos del mercado de trabajo americano. La respuesta de las bolsas europeas ha sido de un retroceso cercano a un 1% logrando el Ibex salvar los 9.000 puntos.

En España. la balanza por cuenta corriente (por donde aparecieron las grietas de la crisis en 2008) tuvo un superávit de 836 millones de euros en marzo mientras el déficit de la Administración central subió en abril un 1,25%. No obstante, JP Morgan, el primer banco del mundo, mostró confianza hacia la economía española a la que pronostica un crecimiento del 3% este año y descarta "una incertidumbre adicional" ante la repetición de las elecciones.

Más repercusión tuvo en Europa la última encuesta sobre el Brexit, en que un 42% se mostró partidario de seguir mientras un 45% optaba por salir. El desempleo en la zona euro se mantuvo en abril en el 10,2% y la inflación cayó un 0,1%. La Comisión anunciará probablemente mañana una prórroga del Plan Juncker de reactivación de la zona, dotándole de más medios. El problema de fondo en Europa y EEUU es que la productividad de la economía global está bajando por falta de inversiones, según ha explicado Ángel Gurría, secretario general de la OCDE. 

En Wall Street, el Standard&Poor´s daba señales de resignación, sin grandes descensos. Así termina mayo, un mes en que el Ibex se ha revalorizado cerca de un 1%, con ArcelorMittal de gran protagonista.