La nueva tasa que el Ayuntamiento de Barcelona aplicará a los libreros que pongan parada en la denominada zona profesional del paseo de Gràcia a la próxima festividad de Sant Jordi se debería destinar al fomento de la lectura, en especial entre los más jóvenes. Esta es la petición que ha elevado el grupo municipal de Trias per Barcelona, que se ha mostrado favorable a una tasa que cuenta con el visto bueno de la Cambra del Llibre, pero que reclama que se informe de la recaudación y su destino. De hecho, la propuesta de TriasXBCN es que el dinero vaya a "programas de fomento de la lectura entre niños y jóvenes de la ciudad."
Este martes, el concejal Joan Rodríguez ha registrado un ruego al ejecutivo municipal en que ha reclamado que informe de la cantidad recaudada por la nueva cuota, "y que esta tenga también un carácter especial y sirva para dar un sentido extra a la fiesta". Rodríguez, responsable del ámbito de cultura del grupo de TriasxBCN, ha apuntado que "Sant Jordi, una fiesta ligada a nuestro ADN, como ciudad y como país, este año viene marcada por una tasa que tendrán que pagar los libreros y paradistas que se instalen en este ámbito y otros de la ciudad en que se venderán libros", para señalar que Junts per Catalunya-Trias per Barcelona no está en contra de esta tasa, y por eso ha añadido la necesidad de invertir este dinero se dedique a fomentar, precisamente, la lectura.
En concreto, el texto del Ruego de Trias per Barcelona señala: "Que, con el fin de preservar y fortalecer el carácter excepcional de la festividad de Sant Jordi, el Ayuntamiento de Barcelona informe de la cantidad recaudada con la introducción del pago de la tasa municipal por uso de los espacios de la Supermanzana literaria y los otros espacios habilitados por venta de libros y rosas en la ciudad, y destine una cantidad equivalente a la de los recursos obtenidos a programas de fomento de la lectura entre niños y jóvenes de la ciudad".
Un pago controvertido
Las editoriales y libreros que quieran colocar su parada en la zona profesional, organizada por la Cambra, tendrán que hacer un pago que oscila entre los 96,80 y los 387,20 euros, para los agremiados, y de entre los 121 euros hasta los 484 euros para los que no, una novedad que ya ha contado con las quejas de parte de editoriales, librerías, autores y colectivos sociales que denunciaron "un proceso de externalización y privatización" de la festividad de Sant Jordi. Los firmantes de un manifiesto contrario a la tasa han pedido tres puntos principales: revertir este proceso, anular el copago con una gestión pública y volver a "un Sant Jordi popular".