La conmemoración del bicentenario de las cuatro diputaciones catalanas ha vivido este miércoles por la tarde su acto más solemne con una celebración conjunta en el recuperado paraninfo de la Escola Industrial de Barcelona, que se ha convertido en un espacio de autoafirmación de estas instituciones de gobierno intermedio que han sido las más importantes administraciones catalanas de los últimos doscientos años a excepción, claro está, del periodo de la Mancomunitat y el de las dos restauraciones de la Generalitat de Catalunya.
Los cuatro presidentes y presidentas de las diputaciones de Barcelona, Núria Marín (PSC); Tarragona, Noemí Llauradó (ERC); Girona, Miquel Noguer (Junts) y Lleida, Joan Talarn (ERC) han firmado el manifiesto 'Las diputaciones catalanas, al servicio de los municipios y de sus ciudadanos y ciudadanas' donde se recuerda que, desde las elecciones municipales de 1979, estas administraciones públicas han desarrollado y consolidado un modelo de gobierno local intermedio al servicio de los municipios. En el acto ha participado también la consellera de la Presidència de la Generalitat de Catalunya, Laura Vilagrà y han asistido anteriores presidentes de las diputaciones, entre los cuales el president José Montilla.
En la lectura del manifiesto se ha recordado que en mayo de 1822 se constituyeron las diputaciones, pero que el absolutismo las liquidó el año siguiente, hasta que se recuperaron de manera definitiva unos años más tarde, y que a pesar de sus páginas "de luz y de sombra" hay que expresar la voluntad de "no limitarnos a echar una mirada al pasado, sino para subrayar lo que somos hoy y lo que queremos y podemos ser". En este sentido, se ha recordado de que las diputaciones son un gobierno local intermedio fundamentado en la "redistribución municipal".
Seguidamente, han tomado la palabra los cuatro presidentes. El leridano Joan Talarn ha recordado que ya los diputados catalanes que participaron en la elaboración de la constitución de 1812 tenían como objetivo la "recuperación de las libertades catalanas" y como los diversos gobiernos, también los liberales, "decepcionaron progresivamente las esperanzas de los catalanes". El gerundense Miquel Noguer se ha mostrado convencido que había que hacer un acto unitario en la capital del país y ha recordado el papel "determinante de las diputaciones a la hora de dar servicio a los ayuntamientos", con casos recientes como el temporal Gloria y la pandemia de la Covid 19.
Marín: "Sin el municipalismo no se entiende Catalunya"
A su vez, la presidenta de la diputación tarraconense, Noemí Llauradó, se ha referido a las diputaciones como "una institución realmente primordial que da apoyo a los municipios", como una especie "de ayuntamiento de ayuntamientos". Finalmente, la presidenta de la Diputación de Barcelona, Nuria Marín, ha mirado hacia adelante asegurando que "después de 200 años, la historia no está cerrada y nos hace mirar hacia el futuro". Por eso se ha referido a que "las cuatro diputaciones vamos a la una, como lo hicimos en mayo de 1822" y ha reivindicado como obra histórica la "centenaria Xarxa de Biblioteques, el Institut del Teatre o la Escola Industrial". "Sin el municipalismo no se entiende la Catalunya de estos dos siglos", ha seguido Marín, para añadir que el bicentenario "no es para reflejarnos en el pasado, sino para coger impulso".
El acto, que ha contado con la actuación del Cor Infantil Amics de la Unió de Granollers ha sido cerrado por la consellera de Presidència, Laura Vilagrà, que se ha referido al acto como un "día de hermandad del gobierno municipalista" y ha hecho un llamamiento a "replantear al modelo territorial" a partir de la "cooperación y la suma de esfuerzos".