La asociación judía CIB.CAT (Comunidad judía centenaria de Barcelona) condena con rotundidad "las agresiones contra propiedades o ciudadanos judíos", en referencia a la acción-protesta de este sábado por la mañana de un grupo de manifestantes propalestina contra el hotel de un magnate israelí en el centro de Barcelona. El presidente de la entidad, Raymond Forado, ha pedido que los líderes políticos catalanes condenen los hechos, que consideran una "actitud racista, represiva y generadora de odio". "Todos los judíos catalanes o todos los israelíes que viven en Catalunya no somos responsables de lo que está pasando a Israel y la franja de Gaza", aseguran en un comunicado emitido, ni tampoco "del sufrimiento de las poblaciones israelí y palestina", añaden. Piden, de esta forma, diferenciar las acciones del Estado de Israel de la comunidad judía en Catalunya, para evitar caer en el antisemitismo.

La entidad pide explicaciones a la CUP y al Sindicat de Llogaters, así como en todos los implicados en la acción, para que argumenten "de qué nos hace culpables, exactamente, ser judíos o ser israelíes", y enaltecen que el hotel del magnate israelí "crea progreso, riqueza y puestos de trabajo" en Catalunya. La CIB.CAT también ha recordado que "culpabilizar a los judíos en masa, y marcar sus propiedades, fue el inicio del genocidio judío perpetrado por la Alemania nazi". Y señalan que "la inmensa mayoría" de los judíos catalanes no son israelíes, de forma que consideran que los manifestantes han cometido un acto de "antisemitismo", no contra Israel.

"Tenemos gente asustada"

En declaraciones a los periodistas delante del hotel este mismo sábado por la tarde, Raymond Forado ha tildado de delito de odio que el hecho de que "se haya marcado un establecimiento" en el centro de Barcelona, "ciudad de paz y de concordia". Agujereo considera grave que eso haya pasado "por el simple hecho de que uno de los propietarios es israelí o judío o lo que sea". "Eso no se puede permitir y exigimos que nuestros líderes políticos vengan y declaren que eso es inadmisible", ha añadido. "Están gritando en la acción y ahora tenemos gente de verdad asustada aquí, en Catalunya," ha advertido sobre los convocantes de la protesta.

La embajadora israelí también denuncia el "ataque"

La embajadora de Israel en España, Rodica Radián-Gordon, también ha condenado la acción-protesta de los manifestantes sobre el hotel, al considerar que se trata de un acto "brutal y antisemita". La diplomática ha hecho un llamamiento a condenar "las agresiones contra ciudadanos judíos, sean españoles o israelíes", así como a sinagogas o a "sus propiedades".

Acción contra el hotel de un magnate israelí

Los hechos en cuestión ocurridos este sábado al mediodía, son que un centenar de personas vinculadas a movimientos sociales y populares han protagonizado una protesta en el hotel Cortés, en el número 25 de la calle de Santa Anna, para denunciar el "genocidio" por parte de Israel a la población palestina; protesta en la cual han ocupado durante más de media hora la recepción del establecimiento y han descolgado las banderas oficiales del hotel para sustituirlas por banderas de Palestina. Los manifestantes, además, han hecho un llamamiento a la "acción directo" contra los intereses económicos del régimen israelí, y han expresado cánticos como "Boicot en Israel", "Las tierras robadas, serán recuperadas", "Israel, asesino del pueblo palestino" y "No es una guerra, es un genocidio".

Collboni y Trias x Barcelona condenan la acción

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha condenado la ocupación este sábado por la mañana de un hotel de la capital catalana propiedad de un magnate israelí por parte de un grupo de manifestantes propalestina; sin hacer referencia explícita, ya que ha mostrado su rechazo a "cualquier acto de violencia o el señalamiento de personas o propiedades", en los términos expresados por el alcalde en un mensaje a las redes sociales. Collboni ha recordado que "vivimos un momento muy difícil y chocante en Oriente Próximo", a la vez que ha señalado que Barcelona "es una ciudad que promueve el respeto de los derechos humanos y la paz entre los pueblos" y que las comunidades musulmanas y judías de la ciudad "son ejemplares y promueven el diálogo y la convivencia".

El concejal de Trias x Barcelona y portavoz del grupo municipal, Jordi Martí, también ha denunciado la ocupación del hotel. Se trata de un establecimiento propiedad de un magnate israelí en la calle de Santa Anna, en el distrito de Ciutat Vella, de la cual un grupo de personas ha ocupado durante más de media hora el vestíbulo y ha descolgado las banderas de la fachada, que han sustituido por las de Palestina. Martí ha asegurado que Barcelona "no se puede convertir en una ciudad en la cual se violentan bienes y establecimientos en razón de la nacionalidad, creencia, etnia u origen de sus propietarios".