La Capella del Sant Crist dels Segadors, anexa a la parroquia de Sant Andreu del Palomar de Barcelona, ha sido declarada como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) por el Gobierno, una decisión que culmina el procés de protección iniciado en septiembre del 2021 por parte del departamento de Cultura y que ya contaba con un informe favorable de la Dirección General del Patrimonio Cultural, y que, de rebote, abre el camino a su rehabilitación y dignificación. De hecho, si entre Gobierno y Ayuntamiento de Barcelona se habían pasado la pelota los últimos meses para conseguir resignificar la Capella, con la declaración acordada hoy por el Govern, la pelota pasa ahora a Ada Colau, que ya no tendrá excusa para no forzar la rehabilitación.

La capilla fue escenario de uno de los episodios que llevaron al inicio de la Guerra de los Segadores (1640-1652), tal como queda recogida en la versión tradicional del himno nacional, ya que fue uno de los puntos de reunión de los segadores que entraron en Barcelona y donde habrían recogido una imagen de Cristo que se convertiría en su emblema. Por eso, en los últimos años ha sido también escenario de una segunda batalla, la del reconocimiento y dignificación. De hecho, desde el 2011 se hace una ofrenda floral la víspera de la Diada Nacional del Once de Septiembre -que recuerda otro episodio histórico, la Guerra de Successión- y tanto partidos políticos como entidades vecinales han defendido la necesidad de rehabilitar el espacio.

De hecho, enl pleno municipal del mes de septiembre hubo un sonado intercambio de reproches entre la concejala de Junts, Neus Munté -actualmente presidenta del grupo municipal- y la concejal del distrito de Sant Andreu, Lucía Martín. Munté advirtió que la capilla "se degrada y estropea día a día con el riesgo de que se vuelva irrecuperable" y reprochó al equipo de gobierno municipal que no hiciera suficientes esfuerzos por conservar la capilla, y a su vez, Martín se justificó asegurando que si la Generalitat declaraba la capilla como BCIN, entonces el ayuntamiento podría trabajar en su recuperación".

Sin excusas

Por todo ello, una vez asegurada la declaración como BCIN, el ayuntamiento podrá empezar los trámites para su rehabilitación. En este sentido, el acuerdo de gobierno tomado este martes asegura que el inmueble es "portador de valores históricos, culturales y sociales relevantes, vinculados al contexto de la Guerra de los Segadores", ya que la villa de Sant Andreu del Palomar tuvo "un papel activo en los hechos de mayo-junio de 1640", fecha de inicio del mencionado conflicto, y, por otra parte, "la capilla habría acogido la imagen del Santo Cristo que, teóricamente, los segadores utilizaron como estandarte de sus reivindicaciones".

De hecho, se acuerda que mosén Clapés, en sus 'Fulles històriques de Sant Andreu de Palomar' (1930), los segadores que entraron en la ciudad el día 22 de mayo -en una primera entrada que se repetiría el 7 de junio, día del Corpus de sangre- llevaban "la imagen de un Santo Cristo, como bandera, procedente de la iglesia de Sant Andreu de Palomar". En este sentido, la protección como BCIN "se presenta como el mejor instrumento para garantizar la pervivencia de sus múltiples valores culturales en las mejores condiciones posibles". De hecho, el mismo acuerdo fija como objetivo es evitar que la alteración del entorno "pueda afectar a los valores, la contemplación o el estudio del Lugar Histórico". Por eso, la declaración permite velar por la visualización correcta del bien y por la integración armónica de las posibles edificaciones, instalaciones o usos que se puedan establecer en el futuro.

Entorno de protección

La visualización de la Capella dels Segadors se hace desde el espacio público donde está situada, denominado plaza de las Dones del Motor Ibèrica, entre las calles de los Segadors y el paseo de Torras i Bages. La capilla, de pequeñas dimensiones, se apoya en una esquina de la iglesia Parroquial de Sant Andreu del Palomar, la cual actúa de telón de fondo a causa de su considerable dimensión en relación con la capilla. Por lo tanto, es desde esta plaza el único lugar donde se generan las perspectivas y visuales generales de la Capella dels Segadors, conjuntamente con los muros laterales de la iglesia donde está adosada.

Por este motivo, se incluirán en el entorno de protección la plaza de las Dones del Motor Ibèrica, delimitada por el punto medio de la calle de los Segadors, que es donde se sitúa la capilla. A continuación, la delimitación sigue por el punto medio del paseo Torres i Bages hasta a la altura de la fachada de la iglesia, punto donde se pierden ya las visuales hacia la capilla. Se incluye la totalidad de la parcela de la iglesia de Sant Andreu de Palomar, ya que cualquier actuación de restauración de esta en el futuro tendría influencia directa en la visualización armónica de la capilla.