Un delfín del Seaworld de Orlando, que parece que estaba cansado de que le hicieran fotos, decidió poner fin a las capturas que le estaba haciendo una mujer quitándole la tableta de las manos y tirándola al agua.

Este es el momento cómico que uno de los visitantes captó cuando se encontraba en el recinto con su familia. Una escena que resulta muy familiar en este tipo de espacios: visitantes que se acercan demasiado a las piscinas sin tomar precauciones con el fin de conseguir la mejor imagen de las vacaciones.

En el vídeo se puede observar como la tableta cae al agua después de que la mujer se lleve un buen susto con el salto del delfín. La reacción de la protagonista es rápida, y consigue retirar la tableta electrónica del agua al cabo de poco tiempo. Se desconoce el estado actual del aparato, pero lo que es seguro es que la mujer no guardará un buen recuerdo de la visita.