Cuando la ficharon en abril para sustituir a Mónica Naranjo al frente de La isla de las tentaciones, Sandra Barneda ya sabía que existía esta posibilidad. En plena pandemia de coronavirus, multitud de series de televisión, películas y programas de todo tipo han anulado rodajes por el riesgo de contagio, y esto mismo es lo que le ha acabado pasando después de un mes en la República Dominicana.

La presentadora barcelonesa y su equipo se desplazaron al país caribeño, a mediados de julio, para grabar la segunda y la tercera temporada del reality estrella de Telecinco. Después del éxito de la primera edición, estaba previsto que la próxima se estrenara en otoño para reemplazar GH VIP. Pero los planes podrían haber quedado totalmente alterados por el posible contagio de Covid-19 de alguno de los compañeros de Barneda. Una situación que Mediaset ha comunicado a los espectadores a través de las redes sociales:

Rodaje cancelado y programa paralizado. El equipo resta a la espera de conocer los resultados de las pruebas PCR a las que se han tenido que someter. Aunque el periplo sólo acaba de empezar. Por mucho que el compañero que presenta síntomas diera negativo, así como el resto de miembros de la plantilla, la fiabilidad del test no es del 100% y las medidas de prevención les obligan a aislarse y mantener una cuarentena obligatoria de 14 días para evitar riesgos.

A la espera de los resultados de los análisis, está claro que si las grabaciones no continúan con normalidad en las próximas semanas, Telecinco tendrá que repensar las previsiones que tenía sobre el estreno del programa para después del verano.