'Masterchef' es un programa que nos deja siempre titulares, no solo culinarios, sino mediáticos. Si ya en la versión de anónimos algunos digitales suelen especular sobre la vida de algunos concursantes "porque salen en televisión" ni se imaginan cuando Shine Iberia reúne a 15 famosos aspirantes a chef. En el episodio de ayer, 2º de la temporada séptima del 'Celebrity', pudimos ver a dos mujeres como la copa de un pino. Dos mamás que, además, lo han sido de mayores. Una con 39, Lorena Castell; y otra con 42, María Zurita, la prima del rey Felipe VI y sobrina de Juan Carlos I.

María Zurita y Lorena Castell
María Zurita y Lorena Castell

Es precisamente esta última la que nos ha causado impresión con sus declaraciones. Mientras ambas hablaban del embarazo, Zurita contó cómo tuvo a su hijo. Mediante fecundación in vitro, Zurita se quedó finalmente embarazada, aunque el parto tampoco fue nada fácil. Ante las cámaras de 'Masterchef Celebrity', mientras pelaba unos tomates cherry, lo reconocía: "Estuvo a punto de morirse". Y es que tal y como cuenta la aspirante, que ha hecho muy buenas migas con el humorista Xavier Deltell en solo dos semanas de talent, su bebé -que se llama Río- nació a la semana 29. Un parto, sin duda, prematuro.

Los ligues de María Zurita

Como buena celebrity, Lorena Castell intentaba sacarle jugo a las palabras de María Zurita, que después de contar al detalle el parto de su hijo, explicó que ahora ella vive con sus padres, pero que estos ya no pueden cuidarse tanto de Río. "Mi madre va en silla de ruedas y es ciega y mi padre ya tiene casi 80 años", cuenta la tía prima de Leonor y Sofía, que vive alejada de los títulos nobiliarios. Pero Castell seguía repreguntándole, incluso por cómo se lo hace con los ligues si vive en casa de sus padres. "¿Qué ligues? No estoy yo para ligues... ¿Qué ligues?", le replicaba atónita Zurita. "Siempre hay que estar en el mercado", le contestaba su compañera.

Eduardo Rosa, a la calle: Jordi Cruz lo fulmina

El segundo expulsado de la edición fue el actor de cine Eduardo Rosa. Los aspirantes en carrera que no se habían salvado en la prueba por equipos disputada en Elche tuvieron que, en 75 minutos, cocinar un plato asiático. La visita de Hideki Matsuhisa, chef del restaurante barcelonés Koy Shunka, inspiró a los delantales negros... menos a Eduardo. Rosa se la pegó de valiente y presentó ante el jurado unos espaguetis que los tituló como un "lo intenté con noodles". Sin duda lo intentó, pero el resultado no podía ser más catastrófico: el grado de insipidez del plato fue proporcional a la bronca que se llevó por parte de los miembros del jurado, en especial de Jordi Cruz. El chef catalán le mandó una reprimenda de época a Rosa: "Esta prueba te ha superado. Hoy pedíamos platos que nos hicieran viajar y tú no lo has logrado. En esta prueba solo hay posibilidad de un viaje, y este seguramente será a tu casa". Letal, Cruz. Ciao.

Eduardo Rosa, ante los jueces
Eduardo Rosa, ante los jueces