A través de una prueba genética que se realizó para la serie documental de National Geographic sobre la longevidad, Chris Hemsworth descubrió que tiene dos copias del gen APOE a4, relacionado con la posibilidad de padecer mayor riesgo de Alzheimer en el futuro. El padre del actor también lucha contra la enfermedad que a día de hoy no tiene cura y poco a poco deteriora a la persona.
Sin duda fue una noticia muy dura recibirla de golpe, sin anestesia y sin esperarla. Un duro revés que cambió su vida por completo. Tuvo una sensación de desconcierto. “Me dijeran que esto podría ser lo que podría matarme fue como, vaya, me dejó un poco desconcertado”.
Según el médico Peter Attia, especialista en longevidad, que participó en el programa ‘Limitless’, el actor australiano tiene posibilidades de desarrollar la enfermedad entre ocho y diez veces más que el resto, pero no tiene por qué desarrollarse la enfermedad, igual que las personas que no tengan el gen pueden desarrollar demencia.
La enfermedad no tiene cura, así que es importante atacarla para reducir al máximo su efectividad y retrasarla en caso de aparecer en un futuro. Debe realizar unos ajustes algo agresivos a su estilo de vida para reducir el riesgo hasta llegar a ser tan susceptible como cualquier otra persona. A sus 40 años ha decidido cuidarse para combatir la enfermedad.
Chris Hemsworth decidió cambiar su vida
“Fue una buena patada en el trasero y un recordatorio de que debo hacer todo lo que esté a mi alcance para tener la mejor oportunidad de pelear”, cuenta el intérprete que da vida a Thor en la pantalla a la citada publicación, a la que añade que “cualquier trabajo que esté haciendo por la salud de mi cerebro beneficia al resto de mi cuerpo, lo convertimos en algo positivo”.
Chris Hemsworth y Elsa Pataky han hablado siempre de este tema con total naturalidad para conciencia a las personas y dar voz a esta enfermedad que cada vez afecta a un mayor número de personas y a una edad más temprana.
Para reducir la enfermedad, según el doctor, le recomendó realizar ejercicio físico diario, “cepillado y uso de hilo dental para reducir la inflamación sistemática, el uso de la sauna todas las semanas y una buena salud auditiva, unas rutinas que Chris ha puesto en práctica, que siempre ha practicado ejercicio, pero además ahora hace mindfullness y meditación, “incorporando más soledad a mi vida”.
