Jorge Javier Vázquez aprovecha su espacio en Lecturas para compartir todo lo que le pasa por la cabeza con los lectores. Reflexiones después de entrevistar a algun famoso, confesiones sobre su vida privada o anécdotas personales. Cualquier tema es bueno para escribir unas líneas, y si habla de dramas, todavía mejor.
En esta ocasión, el presentador ha relatado un negro episodio que ha vivido en su último viaje a Lisboa. Después de todo un día con la lluvia dificultando su turismo y haciendo que estuviera a punto de caer en siete ocasiones, decidió entrar en un restaurante a cenar algo. Y en un momento de descuido, le robaron el bolso con la cartera dentro, la documentación y el móvil.
"Viene a buscarme a la policía y me lleva en coche a una comisaría a denunciar. Como hay demasiada gente, me llevan a otra. Así paso mi noche del domingo. Denunciando". Un domingo que acabó mal, premonición de un lunes todavía peor.
"En la policía me aseguraron que con la denuncia podría viajar, pero al llegar al mostrador del vuelo, me indicaron que sin documento con fotografía no es posible coger el vuelo. Nervios. Colapso". Una situación límite en la que intentó aprovecharse de su status de estrella televisiva: "Les digo que trabajo en televisión, que tienen fácil saber que soy yo el de la tarjeta de embarque mirando Internet. Pero todo les debe sonar muy marciano porque no me hacen ni caso. Me dicen que vaya a la embajada para que me den un salvoconducto".
Completamente desesperado, suplicó casi llorando, diciéndoles que necesitaba embarcar al tener una función por la noche. Finalmente acabaron dejando que subiera al avión, después de que enseñara una fotografía del DNI que su excuñado le había enviado al correo.
"Todavía estoy temblando. Así como la Jurado dijo "no vuelvo nunca más al AVE", yo no vuelvo nunca a Lisboa en un ratito". Un episodio digno de película, con un Jorge Javier desesperado.