A Jordi Basté la actualidad le ha acabado por desesperar, reavivando su indignación por el pim-pam-pum general contra Catalunya. El sin sentido del juicio del el 1-O, la prohibición de acceder al Parlamento Europeo a Puigdemont y Comín, las comparaciones deshonestas entre los peores años del terrorismo de ETA y el proceso soberanista... el tsunami informativo ha sido de gran calibre y de difícil digestión, incluso para un veterano como Basté. Un veterano que no ha podido reprimir su hartazgo, estallando por la cuestión de la declaración del Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria del Consejo de Derechos Humanos de la ON, que pide la inmediata liberación de Jordi Cuixart, Jordi Sànchez y Oriol Junqueras por contravenir la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Una declaración despreciada por Irene Lozano, secretaria de Estado de la España Global, calificándola de "labor poco rigurosa" por parte de "víctimas de una nueva campaña de desinformación de parte del independentismo más radical".

El tuit de Lozano ha sido demasiado para Basté, que ha tirado de hemeroteca para quitarle la careta a la socialista, destacando su hipocresía cuando a unos (los que le interesan) los considera "presos políticos" y a otros "políticos golpistas encarcelados" (o fórmulas similares), basándose (¡oh, sí!) en manifestaciones de Naciones Unidas. Así se refería Lozano al hablar de Leopoldo López, el líder opositor venezolano, en el Congreso de los Diputados.

irene Lozano La Sexta

La Sexta

"Solo se puede exigir su inmediata puesta en libertad", decía la del PSOE. "Encarcelar a disidentes políticos es cruzar una línea roja". Caray. La cara dura del establishment español es infinita. Y difícilmente soportable. Basté recordaba, acertada y emoionalmente, a "Josep Rull bostezando mientras mira los vídeos, y un urgente asegura que la Fiscalía no se mueve y sigue pidiendo rebelión, sin despeinarse, sin pudor, sin humanidad, y veo a Carme Forcadell —ayer era su cumpleaños— sentada con Dolors Bassa, como cada día, y sólo tengo preguntas: Cómo puñetas les podemos sacar de allí dentro?".

La dignidad en España esta secuestrada por la hipocresía de un Estado capaz de pasarse por el forro hasta el sursuncorda. ¿Cuál será la próxima institución infectada por el virus indepe? Hasta la ONU les importa un rábano.