A menudo se relaciona la edad avanzada y la sabiduría. La fórmula es acertada en muchos casos. Excepto en uno: el de Fernando Sánchez Dragó. El escritor de 83 años, musa de la extrema derecha, polemista profesional y supuesto emblema de la intelectualidad española, cada año empeora. Cada mes. O cada minuto que pasa confinado, para ser más exactos. Dragó, autor de frases y presuntos hechos asquerosos en el ámbito de la sexualidad, pasa estos días pendiente de los balcones de sus vecinos, disfrutando de forma viscosa, machista y mezquina de aquellos que viven a su alrededor: "veo cómo una señorita extranjera de alto voltaje y formas exuberantes hace el amor con brío sobre un sofá. No se distingue si la persona que tiene debajo es varón o mujer. La banda sonora rasga el silencio."

Abascal Dragó Feria Libro EFE

Abascal Dragó Feria Libro EFE

Cuando acaba la sesión de vouyerisme, vuelve a la madriguera y a las fantasías políticas. Y entre recuerdos del 36 y deseos del 2020, delira. Quiere que caiga Sánchez para poner el gobierno de sus sueños. Dos iconos del españolismo. Dos empresarios que todo lo que hacen, es bueno, patriota y digno de beatificación. Los dueños de las empresas más potentes del estado: Juan Roig, de Mercadona, y Amancio Ortega, de Inditex. Una dupla invencible que resolvería todo por arte de magia, el tiki-taka de Moncloa. "Gobierno de salvación nacional", le llama.

amancio ortega gtres

Amancio Ortega GTRES

Felipe González Juan Roig EP

Felipe González Juan Roig EP

sanchez drago cayetana GTRES

Sánchez Dragó Cayetana Álvarez de Toledo GTRES

¿Falta de vitamina D? ¿Problemas de desorientación por el coronavirus? ¿Sobremesas de digestión complicada? Sea lo que sea, le está haciendo daño.