Este sábado vuelve a ser un 23-F. 38 años desde que Tejero gritó "¡Quieto todo el mundo!" en el Congreso de los Diputados. Una fecha que todavía sigue teniendo muchas sombras, donde el papel que tuvo que ver la monarquía no ha quedado suficientemente explicado. Ahora, casi 40 años después, Felipe VI se llena la boca diciendo que "No es admisible apelar a una supuesta democracia por encima del derecho" y el trío La la lá de Casado, Rivera y Abascal amenaza Moncloa.

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TVE

Veremos qué dicen este 23F los políticos de derechas y si vuelven a llenarse la boca con elogios al papel de Juan Carlos aquel día y la unidad de España y bla, bla, bla. De momento, quien ha hecho un retrato más sangrante de la España que nos hubiera tocado vivir en caso de prosperar el golpe de estado del militar lo ha hecho, una vez más, Andreu Buenafuente en su Late motiv. Un monólogo ácido, bigotito facha incorporado, una realidad paralela donde Ortega Cano es "ministro de Toros", donde el himno español tiene letra de Marta Sánchez, "ministra de Cultura, por cierto", y donde el mismo programa lo presenta Arévalo.

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@LateMotivCero

Lo más sarcástico, sin embargo, de lo que dijo, es cuando informa que él es un presentador suplente, y su procedencia:  "yo soy un humilde caricato de esta comunidad conocida en la época negra pre-Tejero como Catalunya, pero eso ya pasó, ahora saben que se llama 'Aragón, la nueva'", y lo que dice de Moncloa,  "parece que fue ayer cuando se movió al lugar que le correspondía por categoría y por historia... al Valle de los Caídos":

El humor y la ironía de Buenafuente a menudo tienen más carga de verdad incorporada que la propia realidad.