El Estado español está más polarizado que nunca: el panorama político ha estallado del todo y tenemos dos bandos diferenciados, los patriotas y los vendepatrias. Si todavía no saben en cuál de los dos sectores se encuentran, es que tenemos un problema. La cuestión de la amnistía ha acabado de dinamitar un ambiente crispado, en el que el coco indepe, terrorista y etcétera, se ha hecho con los mandos de la nave y la pilota a toda velocidad contra el corazón de la nación española, santa y escogida por la divina providencia. PP, VOX y otros grupúsculos de extrema derecha no dejan de chillar desde hace días. También se oyen voces escandalizadas en el PSOE, partido del gobierno. Las viejas glorias, algunas de ellas momificadas, se hacen cruces por lo que consideran un atropello a los cimientos del país. Gente con las manos tan limpias como Felipe González, Alfonso Guerra y compañía. Estos son los socialistas que excitan a Ayuso, Aznar y Feijóo, quienes acaban de adoptar a un nuevo miembro en este selecto club.

Se trata de un actor muy valorado, veterano e imprescindible para entender el panorama audiovisual español desde hace décadas, Antonio Resines. Tiene 69 años, grandes éxitos, películas de culto, premios, series que forman parte de la historia de la televisión. Las pasó canutas con el coronavirus, le fue de un pelo no tener que marcharse anticipadamente. La recuperación fue lenta, dificultosa, y finalmente feliz. Desde hace un tiempo es un hombre anuncio, la cara recurrente de una compañía de telecomunicaciones o de embutido. Su participación en ficciones de cine y televisión ha disminuido, pero continúa en activo. Donde se prodiga más es como invitado o entrevistado en programas. Por ejemplo, hace un par de días a 'Cierno General' de RTVE. Un espacio desconocido para el gran público, pero que está viviendo su momento álgido gracias a las declaraciones de carácter político de Antonio. Jenaro Castro, hombre fuerte del PP en la Corporación, se frotaba las manos.

Antonio Resines Pano General RTVE
Antonio Resines con Jenaro Castro en 'Plano General' / RTVE

Si hace unas horas la gran actriz Marisa Paredes se convertía en viral por su reacción contra Isabel Díaz Ayuso en la capilla ardiente de Concha Velasco, el eco de la mala luna de Resines, atacando en la dirección contraria, han alegrado las noches de muchos cayetanos y compañía. El de Torrelavega, en Cantabria, se confiesa socialdemócrata y votante asiduo del PSOE. Cosa que, evidentemente, no hará nunca más. Cuando menos, con Perro Sanxe pactando con Carles Puigdemont, con los herederos de ETA Bildu, con el PNV... Vaya, se diría que alguien le ha cogido la libreta a Cayetana Álvarez de Toledo.“Lo que está pasando no es de recibo, muchos socialistas comparten esa misma idea, pero no la expresan por intereses propios. La amnistía implica la inexistencia de delito. Hay que decirle al electorado que el PNV y Junts son de derechas de toda la vida. EH Bildu no son socialdemócratas, son otra cosa. EH Bildu siguen siendo gente que viene de un sitio espantoso, son los continuadores políticos de ETA. A la gente se le ha olvidado esto y lo que estoy diciendo no es un discurso de derechas, es un discurso realista”. Realista, claro, para él.

Antonio Resines graba RTVE
Antonio Resines / RTVE

La reacción ha sido diametralmente opuesta. Hay un alud de descargas del vídeo de todos aquellos que vayan de manifestación a Madrid, seguro que lo tendrán puesto de banda sonora. Es el nuevo Don Rafael Nadal Parera, pero en actor. Después está la crítica de los que no comulgan con su filípica. Que son muchos, también.