Han pasado muchos años desde que Belén Esteban se arropó en Toño Sanchís. Era su mayor auge televisivo, pero también estaba viviendo un infierno. En aquella época la colaboradora de ‘Sálvame’, apodada ‘Princesa del Pueblo’, se sintió muy agradecida a su representante por haberla cuidado en sus peores momentos, también a Andrea Janeiro. Era tan solo una niña y estaba sola, ya que su padre, Jesulín de Ubrique, no mostraba un gran interés. Ahora la historia ha cambiado, y quien consideraba un segundo padre para su hija, Andrea tenía muy buena relación con el representante, es su gran enemigo.
Desde hace años han mantenido una batalla legal. Belén Esteban le demandó por apropiarse de sus bienes. El representante se embolsó más dinero del acordado entre ellos. Le debía 400.000 euros. La semana pasada se conoció la sentencia y ha dado la razón a la tertuliana. La Audiencia de Madrid ha impuesto a Sanchís, antiguo miembro del grupo Los Inhumanos, una pena de dos años de cárcel por un delito continuado de apropiación indebida. El tribunal considera acreditado que aprovechó la “absoluta confianza” que su colaboradora había puesto en él para cobrar durante años comisiones mucho más altas de las establecidas en su contrato. De acuerdo con la resolución judicial, entre 2009 y 2015 Sanchís se adueñó de 475.571 euros, aplicando porcentajes del 30%, 40% e incluso del 85% en acuerdos que solo fijaban un 20%. Además, se le impone una multa de 2.100 euros y la obligación de indemnizar a Esteban con una cuantía que se concretará en la fase de ejecución de la sentencia.
Belén Esteban gana definitivamente su batalla legal contra Toño Sanchís
El 1 de diciembre de 2015, hace justamente una década, Belén Esteban rompió su relación profesional y personal con Toño Sanchís. La colaboradora se sintió muy dolida, y es que el representante era parte de su familia. De hecho, en su testamento figuraba como tutor legal de Andrea Janeiro por si a ella le pasaba algo antes de que la joven fuese mayor de edad. La sentencia destaca que esta estrecha amistad permitió a Sanchís gestionar los ingresos y contratos de Esteban sin supervisión directa, creando un sistema de comisiones infladas que derivó en un enriquecimiento ilícito.
Hace unos años, la justicia ya dio la razón a la de Paracuellos, fue su primera victoria, Toño Sanchís fue condenado a pagar 388.868 euros, un dinero que pudo darle a la colaboradora quedándose sin casa. Vendió la vivienda en Villanueva del Pardillo. Esta propiedad, gravada con una hipoteca de más de 200.000 euros, fue adquirida por Esteban en 2018, reformada y finalmente vendida en 2020. La sentencia penal ahora ajustará la cantidad final a abonar, descontando lo ya percibido en el proceso civil y la venta del inmueble.
La Fiscalía pidió para él tres años y medio de prisión, mientras que la acusación particular pidió cuatro años y medio de cárcel.