La sobrina de Isabel Pantoja y colaboradora de Sálvame, Anabel Pantoja, está en boca de todo el mundo. ¿El motivo? El último y carísimo capricho que se ha permitido, al alcance de muy pocas personas, en plena pandemia del coronavirus y que ha desatado la locura. Pues la de Sevilla, para celebrar los tres años de relación que acaba de cumplir junto a su pareja Omar Sánchez, con quien se tenía que casar en verano del 2020, ha disfrutado de un lujoso fin de semana en un hotel de Gran Canaria que no ha estado exento de polémica.

Dos noches. La del 12 al 13 de febrero y la del 13 al 14. O lo que es lo mismo, 48 horas. Este ha sido todo el tiempo que Anabel Pantoja ha necesitado para tirar la casa por la ventana y demostrar el gran imperio económico que ostenta. Pues la de Telecinco, en motivo de la festividad de San Valentín, se ha alojado en la suite de un lujoso resort de cinco estrellas por la que ha pagado la friolera de 1.357 euros la noche. Una cantidad que multiplicada por dos suma 2.714 euros. Un tremendo pastizal gracias al que Anabel Pantoja y su chico no solamente han podido disfrutar de un fin de semana repleto de amor, sino que se han puesto hasta arriba de comida y bebida y también han aprovechado para sorprender a todos con fotografías subidas de tono como estas:

Un capricho, al alcance de muy pocas personas, con el que Anabel Pantoja demuestra que las cosas no le van nada mal, sino todo lo contrario. La prima de Kiko Rivera ha conseguido hacerse de oro gracias a su polémica colección de joyas, línea de bolsos y apariciones en Sálvame, donde cobra entorno a unos 600 euros por tarde. Y eso que sus apariciones son muy criticadas, puesto que se la acusa de no hacer nada y pasarse las horas mirando su teléfono móvil. ¿Cuál será el próximo gran capricho con el que sorprenda Anabel Pantoja