Una piel tersa y brillante es la base para una apariencia perfecta. Por ese motivo, varias celebridades se han sumado a una tendencia que ya lleva tiempo en el mercado de tratamientos estéticos, pero sigue siendo una de las favoritas de las jóvenes, ya que resalta sus rasgos sin endurecer sus facciones.
Esta técnica es conocida como “Baby Botox” y se ha convertido en el retoque favorito de Kylie Jenner. Este tratamiento es ideal para las pieles jóvenes y esta es la razón por la que la CEO de 'Kylie Cosmetics' ha confiado totalmente en su aplicación para mejorar la apariencia de su piel.
Kylie Jenner/ Instagram
La menor del clan Kardashian-Jenner se ha hecho ligeras infiltraciones de botox en las zonas más “problemáticas” de su rostro, para evitar y prevenir las arrugas de expresión: La frente, “las patas de gallo” y el entrecejo, son las zonas del rostro donde suelen colocarle botox a la pareja de Travis Scott. La joven siempre ha indicado que todos sus cambios faciales son productos de su técnica de maquillaje, pero no hay que ser un experto para demostrar que sí se ha sometido a varios retoques para mejorar la apariencia de su cara.
Por lo general, el bótox suele ser relacionado con una apariencia poco natural, sin expresión y con las facciones congeladas. Por esta razón, el “Baby Botox” se creó para revolucionar la industria de la medicina estética al “suavizar la contracción del músculo, y de esta manera prevenir la formación de arrugas, en vez de paralizarlo”, indicó el especialista en medicina estética, Dr. Moisés Amselem.
Moisés Amsalam/ Agencia
Este tratamiento consiste en la aplicación de toxina botulínica en una menor dosis en las áreas de la cara donde se podrían formar las arrugas de expresión. La aplicación es igual a la del botox tradicional, con la diferencia de que se hace en personas que aún no tienen arrugas marcadas. En vez de eliminar las arrugas, se trata de prevenirlas, por esa razón se utiliza una cantidad menor de producto, dado que la musculatura de una persona joven es menos activa que las de las personas que ya tienen las arrugas de expresión marcadas en su cara. La duración del efecto de este tratamiento dependerá de la cantidad de botox que se le coloque al paciente. Por lo general, el efecto dura entre 4 a 6 meses, pero puede ser menos en el caso del “Baby Botox”, ya que la dosis de la toxina es mucho menor que la del tratamiento tradicional.
A diferencia del bótox tradicional, la aplicación de un tratamiento de “Baby Botox” se puede iniciar en personas jóvenes de unos 20 a 25 años, aunque todo dependerá de la recomendación del médico especialista, y el diagnóstico previo de la piel del paciente: “la edad aconsejable para su aplicación en ambas técnicas es orientativa. Todo depende del paciente y de la posterior examinación de su gesticulación y prever dónde irá formando sus arrugas de expresión con el paso del tiempo”, indica el especialista, Dr. Moisés Amselem.