Cuando Britney Spears volvió a ser libre tras la tutela legal que ejercía su padre a lo largo de 13 años, sus fanáticos permanecieron al tanto de su estado y evolución. Lo cierto es que ellos fueron, en gran medida, los que hicieron presión para que su caso llegara nuevamente a la justicia. Desde que retomó las riendas de su vida, el público ha celebrado con ella sus victorias profesionales y exposición en los medios. Y, recientemente, ocurrió algo extraordinario, los fans de la popstar llamaron a la policía. ¡Mira de qué se trata!

Quedó claro que Britney Spears tiene el fandom más comprometido. El movimiento Free Britney sentó las bases para lo que hoy en día es un amplio grupo de personas dispuestas a alzar sus voces por la cantante. Pero, actualmente, su fanaticada está preocupada por los controvertidos vídeos y fotografías subidas de tono que publica la artista en su perfil. Como ella misma ha asegurado en varias ocasiones, la tutela legal le generó una importante factura psicológica con la que todavía tiene que lidiar. Muchos no confían en su estabilidad emocional. Teniendo en cuenta esto, cuando la intérprete decidió borrar su cuenta en Instagram, sus seguidores mandaron a la policía a su casa. 

Resulta que días antes de que su cuenta desapareciera, había protagonizado un altercado con su esposo en un restaurante. Aunque después se apresuraron a decir que no sería eso lo que ocurrió, parece que su matrimonio no pasa por un buen momento. La preocupación de todos fue a niveles elevadísimos, tanto que la policía recibió llamadas de mucha gente. Si quieres saber cuáles fueron los hallazgos de la policía y la reacción de la protagonista en cuestión, sigue leyendo. 

Britney Spears se molesta después de que los fans manden a la policía a verla 

Los que siguen a Britney desde hace tiempo pueden corroborar que no sería la primera vez que elimina sus cuentas de las redes. Lo ha hecho hasta en tres ocasiones y habitualmente el motivo es tomarse un respiro. En realidad, fuentes cercanas aseguran que está bien y que no se encuentra envuelta en ningún problema. Así pues, al llegar la policía a su casa, constataron que los fanáticos habían exagerado todo. “Puedo confirmar que hemos recibido llamadas y también que no consideramos que Britney Spears esté en peligro”, comunicó un representante del cuerpo de policías. 

“Amo y adoro a mis fans, pero esta vez las cosas fueron un poco demasiado lejos y mi privacidad fue invadida”, dijo la empresaria a través de Twitter. Además, aclaró que no hubo necesidad de que las autoridades ingresaran a su hogar y que se fueron de inmediato. Luego de este episodio invasivo por parte de los internautas, la hermana de Jamie Lynn Spears se quejó de sentirse “acosada”. Aunado a eso, no estuvo conforme con las noticias que salieron al momento, que una vez más la dejaron ver como una persona indefensa. Britney Spears, de manera justificada, quiere establecer distancia con las personas que se dedican a entrometerse en su vida. ¿Lo conseguirá?