De vez en cuando se cometen según qué atrocidades contra el catalán que son de traca. De vez en cuando asistimos a verdaderas barbaridades públicas contra nuestra querida lengua catalana. De vez en cuando queda sobradamente demostrado que algunos ahorran en correctores lingüísticos a la hora de hacer los carteles de las tiendas, de las publicidades o de los nombres que se ven en la vía públicas. De ejemplos hay para dar y tomar. "Mare no hi ha més que una" ("Madre no hay más que una") para promocionar una serie en una plataforma, "Així sap el món i, a més, sense sortir de casa" ("Así sabe el mundo y, además, sin salir de casa") para promocionar una cadena de supermercados, "Mercè Rodoreda" para indicar una calle de Reus, poniéndole una 'ç' a la maravillosa escritora catalana o una diéresis donde no toca, ni más ni menos que en un cartel del bar de la Facultad de Educación de la Universidad de Barcelona.

La cuenta de Twitter @etfelicitofill suele hacerse eco de esta y de otras aberraciones parecidas con la lengua como protagonista. Y estas últimas horas hemos visto un par de imágenes absolutamente sensacionales, con el catalán como hilo conductor. Bueno, decimos el catalán porque es lo que más se le parece, pero nada más lejos de la realidad. Primero, con una inscripción de alguien que no soporta a los independentistas, pero para hacerlo saber, deja claro que aquí, el único borrego es quien no ha sido capaz ni de escribir bien la palabra independentistas:

Y después, una imagen que se han encontrado en una factura de una tienda de Sant Pol de Mar, un bazar chino que si no lo viéramos, parecería una broma. Sobre todo, porque ya sabemos todos qué y cómo se reproduce la lengua china cuando se imita a alguien de aquel país y la manera como habla aquí: cambiando las 'r' por las 'l'. Un local del carrer Nou de aquella localidad que el pasado mes de agosto emitió una factura después de una compra de la sección de ferretería. ¿Y qué se lee? Bingo: "Sant Pol de Mal"... Y no es la única cosa que está mal en esta factura... La red se ha abonado en cero coma:

Que en el bazar chino este de Sant Pol no se preocupen. Su error nunca será como la aberración que cometió el BOE, que en la publicación de un decreto del ministerio de Agricultura tuvo las narices de escribir 'Pajares de Yuso' en lugar del Pallars Jussà.