La visita del presidente de Portugal está provocando que los Reyes se muestren muy cómplices y sonrientes. Felipe VI y Letizia han vaciado la agenda oficial para dedicarse en cuerpo y alma a su invitado, de quien no se separan. La recepción fue muy espectacular, con un batallón de la Guardia Real pasando revista y los himnos de los dos países sonando.
De aquí pasaron a organizar una cena de gala en su honor, en la que vimos cómo la monarca tenía un gesto con la reina Sofía después del escándalo del vídeo en la catedral de Palma. Decidió ponerse una de sus tiaras preferidas, con diamantes y perlas combinados con un vestido de noche en azul marino. Durante esta ceremonia, el portugués se mostró muy próximo con la reina dándole un beso en la mano tras otro.
Casa real
Pues bien, parece que este cariño sigue bien latente. El matrimonio real ha asistido al Palacio del Pardo, residencia del presidente de Portugal durante sus días en España. Allí ha ofrecido una recepción organizada por él para agradecerles como le están cuidando. Una recepción que ha estado llena de celebridades portuguesas, entre ellas Luis Figo.
EFE
En esta ocasión la reina Letizia ha optado por un conjunto que lució el año pasado en el 30º aniversario del diario Expansión. Un modelo de Carolina Herrera en negro compuesto por un crop top y una falda con plumas. Por lo referente a los complementos, ha lucido unos clásicos zapatos de tacón y un clutch de piel con una franja dorada de Nina Ricci. Un look en un sobrio negro azulado que rompían unos grandes pendientes en dorado.
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Los reyes Felipe y Letizia están siendo unos buenos anfitriones, parece. Lo más importante es que estos días les están dando la oportunidad de mostrarse contentos y mejorar poco a poco la imagen que tanto ha estropeado el espectáculo que protagonizaron en Palma de Mallorca.