La actualidad de la familia real española interesa, no sólo en la península. En Alemania hacen casi un serial sobre su día a día. A falta de monarquía alemana, buenos son unos Borbones. En Francia, tres cuartos de lo mismo. Pero mientras los teutones son bastante críticos con Felipe y Letizia, a quien ven distante y sobreactuada, y con una princesa Sofía que no se separa de la mano de los padres, en el país vecino están encantados de la vida con una vertiente del matrimonio: la manera como educan a sus hijas. La revista Gala dibuja a unos padres atentos y rigurosos a fin de que las niñas no vivan en una burbuja dorada, y que han establecido una norma que quieren mantener sí o sí siempre que puedan.
Efe
"La pareja quiere mantener los pies en el suelo. Y sobre todo cuándo se trata de sus hijas. A pesar de sus agendas, hacen que sea una obligación acompañar a sus dos hijas a la escuela cada mañana". La publicación destaca que para la familia real, "Todos los días son la misma historia. El día empieza a las 7 de la mañana. Toda la familia se reúne para disfrutar del desayuno, preparado por la misma reina". Un desayuno "muy equilibrado" a base de cereales y frutas.
"La reina acostumbra a llevar a las hijas a la escuela, pero no faltan los días donde Felipe VI también las acompañe personalmente. Los dos padres, especialmente la reina Letizia, están muy involucrados en la educación de Leonor y Sofía y mantienen estrechos vínculos con los profesores y la directora de la escuela". Una rutina a la que los reyes volverán cuando vuelva a empezar un nuevo curso escolar y se reencuentren después de que este agosto haya ido cada uno por su cuenta, porque "Felipe necesita desconectar de vez en cuando porque Letizia es muy invasiva, no calla nunca", según revela Pilar Eyre en Lecturas. Eso sí, en Francia, seguirán encantados con los reyes españoles.